Investigados siete trabajadores del centro de menores inmigrantes de Lanzarote

Arrecife

La Guardia Civil del Puesto Principal de San Bartolomé, en Lanzarote, ha investigado a siete trabajadores del centro de menores inmigrantes no acompañados de la isla por la comisión de un presunto delito de favorecimiento de la inmigración ilegal. A uno de ellos se le atribuye también la presunta autoria de un delito de relevación de secretos.

El centro de menores inmigrantes no acompañados se estableció en octubre del pasado año 2018,  con motivo del aumento de llegada de pateras a las costas de Lanzarote con inmigrantes a bordo. Durante los meses de mayor ocupación, fueron unos 140 los inmigrantes internos y 47 los trabajadores que formaban parte del equipo multidisciplinar del centro.

En la mayor parte de los casos, los inmigrantes irregulares fueron internados a la espera de la realización de las correspondientes pruebas óseas que determinasen pericialmente su edad ya que en caso de decretarse la condición de menores de edad, se iniciaban los trámites para regularizar su situación administrativa en España -tal y como establece la Ley Organiza 4/2000 sobre derechos y libertades de los extranjeros en España- y su integración social, pero en caso de ser mayores de edad serían devueltos a sus países de origen.

La investigación comenzó debido a diversas informaciones sobre irregularidades recogidas por los agentes, en el marco de la labor de control y seguimiento que realiza la Guardia Civil sobre este tipo de centros al encontrarse en su demarcación territorial. Deste este cuerpo, se asegura que resultaron de máxima relevancia las declaraciones de parte de los mismos trabajadores y extrabajadores del centro de internamiento en cuestión.

La Guardia Civil afirma que pudo comprobar como siete trabajadores del centro facilitaron, en varias ocasiones, datos sobre el resultado de las pruebas óseas a los internos. Añade que posteriormente les ayudaron a fugarse del recinto,  antes de que los fuesen a recoger agentes de extranjería de la Policía Nacional, y evitar así la devolución a sus respectivos países de origen tal y como establece la legislación española para los inmigrantes mayores de edad interceptados accediendo al país de forma ilegal por lugares no habilitados.

Los agentes detectaron también que, en ocasiones, algunos de estos trabajadores presuntamente dificultaron la labor de búsqueda de los fugados -en concreto, un total de 42 entre los meses de octubre de 2018 y febrero de 2019- cuando finalmente fue ordenado su cierre, ya que aportaban datos erróneos al presentar la denuncia por fuga. Según la Guardia Civil, daban información falsa sobre las ropas o características concretas de los evadidos, demorando los tiempos de comunicación de las fugas hasta 10 días. Añade que permitían dormir en el centro a los evadidos sin comunicar su aparición a las fuerzas y cuerpos de seguridad y que incluso los  escondían cuando llegaba la Policía Nacional a recogerlos tras conocer las pruebas óseas.

Finalmente y tras reunir los indicios suficientes, la Guardia Civil procedió a la investigación formal por la comisión de supuestos delitos de favorecimiento de la inmigración ilegal a siete trabajadores del centro de menores inmigrantes no acompañados de La Santa, además de que a uno de ellos se le atribuyó también la presunta autoría de un delito de revelación de secretos, al ser responsable de velar por la confidencialidad de la información acerca de los resultados de las pruebas óseas de los internos que se le remitía al centro. Las actuaciones practicadas y los investigados han sido puestas a disposición del correspondiente Juzgado, en funciones de guardia, de la localidad de Arrecife.