Cuestiones técnicas retrasan la puesta en marcha de la desaladora de Cabanes

Castellón

La desaladora, que está en el término municipal de Cabanes, no entrará en funcionamiento hasta dentro de dos semanas. Aunque la puesta en marcha se hará fuera del plazo límite que dio la Unión Europea, el 31 de marzo, desde Acuamed aseguran a Radio Castellón que los fondos europeos que recibió el Gobierno central en el momento de su construcción no peligran.

Las dos desaladoras de la provincia de Castellón, la de Cabanes y la de Moncofa, se construyeron en 2006 en la época del boom urbanístico. En el último año, los Ayuntamientos adheridos a estas plantas desaladoras, que son además de los mencionados, Oropesa, Benicàssim y Xilxes, han estado negociando con la empresa estatal Acuamed los convenios que se firmaron en el momento de su construcción porque, en la actualidad, son inasumibles por el elevadísimo coste que supondría para los ayuntamientos, teniendo en cuenta que se construyeron pensando en el desarrollo de futuros proyectos urbanísticos.

Tras conseguir la modificación de los convenios, ahora con una tarifa transitoria de cinco años, los Ayuntamientos aprobaron en las últimas semanas el acuerdo para salvar la situación y no tener que devolver a Europa los 33 millones de euros que dio para su construcción.

La desaladora de Moncofa se puso en marcha la semana pasada y ya está suministrando agua, aunque en Xilxes, que también se aprobó, de momento no pueden consumir el agua desalada porque falta la conexión del municipio a la planta.

La desaladora de Cabanes tardará en suministrar agua a Benicàssim al menos dos semanas más por cuestiones técnicas. Lo mismo ocurrirá en Oropesa, aunque antes el Ayuntamiento deberá firmar con Acuamed el acuerdo, que está pendiente, para poder hacer uso de la desaladora de Cabanes. Mientras, el Ayuntamiento de Cabanes sigue sin tener claro el convenio y continúan con las negociaciones.

Desde Acuamed aseguran que, si todo va según lo previsto, las desaladoras estarán a pleno rendimiento antes del verano.

Recordemos que Compromís ha votado en contra en todos los municipios adheridos a las desaladoras porque consideran que supondrá un considerable incremento en el futuro del recibo del agua. En Benicàssim, Ciudadanos también votó en contra de la tarifa de Acuamed.