¿Dónde comer la mona en Elda este año?

Elda

Se acerca el Lunes de Pascua, las monas y las tradiciones. Pero como cada año, ¿cuál es el mejor lugar para ir a comer la mona?

En estos días, la gente suele celebrar el día de Pascua yendo al campo para compartir la mona, sin embargo en Elda, esta tradición se remonta al año 1929, cuando aparecen referencias directas de que los eldenses salían al Pantano y al Merendero de la Tía Gervasia para comerse la mona.

Pero las costumbres, evolucionan, y en los años 40 se puso de moda acudir el día del Domingo de Resurrección al Arenal del Almorxó, que pertenece al término municipal de Petrer. Sin embargo, a partir de los años 80, Gabriel Segura, cronista de Elda, explica que la recarga natural de arena, ya no recargaba el Arenal, por lo que para conservar ese páramo natural, se prohibió el acceso masivo a la zona.

Otro lugar donde se puede disfrutar de la mona es el Santo Negro, un paraje ubicado entre el ambulatorio, el colegio y la residencia de Elda. Una zona a pie de monte de la sierra de La Torreta.

Sin embargo, hoy en día, el más concurrido es El Pantano, un paraje histórico-natural muy importante en Elda, porque, tal y como explica Gabriel Segura, “desde el siglo XVII tenemos los restos de una presa donde se acumulaba agua para regar la huerta. Desde hace casi un siglo la gente pasaba el día y se bañaba”. Y añade: “Es un elemento importante en el ecosistema natural de Elda”.

En la vecina población de Petrer, los sitios más comunes para disfrutar de este día se ubican en Ferrusa, Rabosa, la sierra de El Cid e incluso Rincón Bello.

Gabriel Segura, también destaca que en Sax se celebra esta tradición acudiendo el Domingo de Resurrección a La Colonia de Santa Eulalia, y al día siguiente al Chorrillo (El Xopo), un paraje que se encuentra más allá del Pantano, entre Elda y Sax.

Alicia Cerdá, bibliotecaria de Monóvar, afirma que antiguamente los monoveros pasaban por la Estación por la tarde para comerse la mona. Desafortunadamente, esa costumbre se ha perdido, ya que en la actualidad la gran mayoría se van a los campos o de viaje en Semana Santa.

Esta tradición también se ha ido perdiendo en Novelda, donde hace unos años los lugares tradicionales para ir a comer la mona era la Serreta, el Corro de l’Assut o el Campet.