La madre de Sara nunca sospecho de Roberto, acusado de ser el autor material de la muerte y violación de la pequeña

Valladolid

La madre de la pequeña Sara, Davinia, nunca sospechó que Roberto Hernández pudiera ser el autor de la muerte de la pequeña hasta que examinó los resultados de la autopsia cuando estaba en prisión. “Nunca se me paso por la cabeza y si hubiera visto algo, habría cortado de inmediato la relación que tenía con él”, ha asegurado a preguntas del fiscal.

Davinia, que se ha negado a responder a preguntas de la Asociación de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales y Malos Tratos, ha asegurado que desistió de llevar a la pequeña al médico por recomendación del propio Roberto y por temor a que los servicios sociales de la Junta le retirarán la custodia de la pequeña. Sí notó que a raíz de la llegada de Roberto a su domicilio (se conocieron el 15 de mayo y se quedó en casa el 30 del mismo mes) los golpes y hematomas de la pequeña Sara aumentaron, hasta el punto de que sus hermanos la alertaron de qué estaba sucediendo con la pequeña. La acusada ha asegurada que el día que Sandra tuvo que ser ingresada la había dejado perfectamente en su habitación

Davinia, militar de profesión, intentaba ha dicho buscar una relación estable con el acusado tras dos intentos frustrados anteriormente, fruto de los cuales tenía dos hijas, la pequeña Sara y Andrea con las cuales vivía. Ese 2 de agosto, cuando Sara fue ingresada con un cuadro clínico prácticamente mortal, la acusada ha dicho que la pequeña se dejó en su domicilio, donde se encontraba Roberto, sin ningún problema normal.

Roberto Hernández, el principal acusado de la muerte y violación de Sara, ha negado los hechos y ha relatado cómo intento reanimar a Sara sin éxito, unos minutos antes de que llegará el Servicio de Emergencia 112 después de encontrarla en la cama inconsciente.

El juicio continuará el lunes con la declaración de los primeros testigos.