El albergue a contratación

Aranda de Duero

La Junta de Gobierno Local podría aprobar este viernes las bases para sacar a concurso la gestión del albergue juvenil del edificio Las Francesas. Estas instalaciones, que han sido objeto de varias fases de reforma en estos últimos seis años saldrán a licitación por cuatro años con un precio base de de 8.700 euros por temporada.

En el pleno ordinario de este mes de abril se aprobaba el reglamento de uso de estas instalaciones, que había quedado sobre la mesa en la sesión anterior ante la necesidad de eliminar un apartado de este documento que obligaba a los usuarios que requieran dietas especiales por intolerancias alimenticias a presentar un informe médico que lo acredite, una cláusula que la secretaria municipal reconocía que podría vulnerar los derechos de los alberguistas

En el debate de este último, el concejal socialista Julián Rasero advirtió al equipo de gobierno del desfase que hay entre el estudio económico en el que se sustentan las bases para contratar la explotación de este servicio, que hablan de 13.780 pernoctaciones al año, y los datos del Instituto Nacional de Estadística y del Boletín de Coyuntura Turística de Castilla y León, que hablan de una media de algo más de 6.000 pernoctaciones en albergues de esta comunidad. Rasero estima que este índice sube gracias a la ocupación que registran los albergues que están en el Camino de Santiago, pero en el caso de Aranda podría reducirse a la tercera parte, equiparándose a los de Salamanca. El edil socialista considera que este plan financiero es excesivamente optimista y podría desinflarse una vez que las instalaciones empiecen a funcionar, con el riesgo de que la empresa que se haga cargo de ellas no le salgan las cuentas. “Con estos datos que os digo, por el bien del Ayuntamiento de Aranda a medio y largo plazo, por favor, no saquéis el pliego, porque después vamos a tener un caso exactamente igual que el de la piscina: vamos a empezar a escuchar palabras como ‘riesgo y ventura’, ‘reequilibrio económico’, porque está sobrevalorado más de cinco veces”, explicaba Rasero, que pedía al equipo de gobierno que le diera “otra vuelta” al estudio económico antes de dar el paso.