Cimavilla reclama accesibilidad y mejoras en el barrio

Gijón

La asociación de vecinos Gigia ha presentado oficialmente 'Cimavilla existe', un documento con propuestas para un plan integral del barrio. Abarca desde la reordenación del tráfico hasta un autobús circular que les permita conectar con el centro de Gijón. Pero también incorpora medidas para recupera edificios deshabitados o un modelo estable para las fiestas.

Una de las principales preocupaciones es el acceso, al que ha añadido una complicación el carril bici. No quieren que se elimine, sino que se reubique para recuperar la entrada por la calle Cabrales. Necesitan facilidades para los servicios de emergencias, una necesidad que se agudiza ante un barrio con la población envejecida casi aislada en una península. Para paliar la falta de ciertos servicios, como un centro de salud o un instituto, proponen una línea circular de transporte público que les conecte con el centro.

Y para reactivar la vida del casco histórico reclaman que se restauren la veintena de edificios deshabitados, gran parte de ellos propiedad de la Empresa Municipal de la Vivienda. El presidente del colectivo vecinal, Sergio Álvarez, lamenta que sólo estén sufriendo los inconvenientes de habitar un espacio declarado Bien de Interés Cultural sin disfrutar de ninguna ventaja.

El documento 'Cimavilla existe' también pide la eliminación de los adoquines y los socavones, la ampliación del colegio público Honesto Batalón o un modelo estable para organizar las fiestas de la Soledad y los Remedios, que no se celebrarán hasta que se establezca una fórmula que garantice su continuidad.