Unos cien internos de los ciento cuarenta que permanecen en el CIE de Aluche han presentado esta queja ante el juez.
Consideran que se están vulnerando sus derechos fundamentales porque la situación sigue siendo la misma.
España priva de libertad a extranjeros que no han cometido delitos, solo faltas administrativas.
En ese escrito se denuncian las irregularidades en las expulsiones, la falta de atención médica adecuada y los tratos vejatorios que sufren los extranjeros allí internados.
Carmen Etxebarría,de la ong Karibu, ha señalado a Radio Madrid que esas agresiones se están produciendo en zonas en las que no existen cámaras de televisión de circuito cerrado.
En definitiva, que los centros de internamiento de extranjeros siguen en el radar de las gongs pero no tanto en el radar de la Justicia.