Una vuelta después Aira empeora a Cea

León

En el mismo tramo del calendario, la Cultural fue a menos tras el cambio de entrenador realizado a finales de la primera vuelta. Cuando Víctor Cea fue destituido se le atribuían buena parte de los males de la rutilante Cultural que caminaba sufriente en su regreso a la Segunda División B. Un relevo técnico y seis fichajes invernales después, el equipo leonés afronta las últimas dos jornadas con su aspiración de play-off pendiente de un hilo, pero con la seguridad de que con Aira al frente las cosas no han ido mejor.

En el mismo número y ante los mismos rivales, la Cultural de Aira ha sumado 26 puntos con un balance de 6 victorias, 8 empates y 3 derrotas. Recogió el testigo con el equipo entre los cuatro mejores y ahora se debate entre la esperanza y la realidad de un triste epílogo. Su goleada ante el colista alivió sus registros realizadores (25 goles a favor y 16 en contra), parejos a los de la primera etapa (24 y 16). Al echar la mirada atrás, la Cultural de Cea ganó dos partidos más en el mismo tramo (8 victorias, 5 empates y 4 derrotas).

Solo un vuelco sorprendente del panorama en las últimas jornadas allanaría el camino para la continuidad del actual inquilino del banquillo leonés, cuya ampliación de contrato está sellada en caso de ascenso. Para dar el primer paso la Cultural precisa de una máxima: ganar sus dos encuentros, en el feudo del San Sebastián de los Reyes y en casa contra el Coruxo, y que SD Ponferradina, Atlético B y Real Madrid Castilla no sumen más victorias. En ese escenario se abre un abanico de posibilidades camino del cuarto puesto. Difícil, pero no imposible. Los filiales respondieron con firmeza y triunfos contundentes y la Ponferradina sigue dependiendo de sí misma. Sin embargo, el Pontevedra CF ha sido el peor parado. Su doble derrota en los campos del Unión Adarve y Las Palmas At. le relegan al sexto puesto, aunque las citas pendientes con colchoneros y merengues podrían relanzale.

Para la primera de las dos nuevas finales, Aira perderá por sanción a Saúl González, que no podrá jugar en su antigua casa, Matapiñonera. Un escenario de hierba sintética para el que el técnico perfilará un nuevo plan después de sus últimas revoluciones. Fruto de ellas, todos los jugadores han tenido minutos en los últimos cuatro partidos, incluido Carlos Morales. El portero madrileño completó el rosario de  llamativas y cambiantes alineaciones en las que no tienen cabida pesos pesados de la talla de Vicente Romero, Borja San Emeterio o Josep Señé, quien no imaginaba semejante despedida.