"Solo nos faltaba tener miedo de que entren en nuestra casa"
Los vecinos de Son Espanyolet denuncian su "indefensión" ante el incivismo en los apartamentos turísticos
Palma
Los vecinos de Son Espanyolet están hartos del incivismo en los apartamentos turísticos de la zona. Sienten "indefensión" ya que muchas de sus denuncias, dicen, no reciben respuesta alguna por parte de las administraciones. El último incidente provocado por los turistas que se alojan en las casas vacacionales ha sido el allanamiento de morada en la casa de un vecino.
Los residentes de la zona no culpan a los turistas, pero no comprenden cómo se ha permitido la proliferación de tantas residencias vacacionales. Según Francina, vecina, este año ya han habido los primeros incidentes: "Ahora viene la temporada: piscinas abiertas en la noche, escándalo, fiestas, gente que está de vacaciones en un barrio trabajador... Solo nos faltaba tener miedo de que entren en nuestra casa".
Algunos vecinos denuncian que los propietarios de los apartamentos turísticos les están haciendo la vida aposta para que se vendan sus casas y se marchen del barrio. Chelo denuncia que es difícil dormir por las noches, a lo que Catalina añade: "También es difícil pasar el día, porque que haya 18 personas en una piscina en un patio pequeño...".
Dice Leonor, que también vive cerca de uno de estos apartamentos turísticos de Son Espanyolet, que allí se ofrecen servicios propios de un hotel, pero sin sus regulaciones: "En una de las plantas bajas hay cocina industrial, cocinero profesional, camareros..." Además denuncian que no hay, por ejemplo, un horario de la piscina, como lo habría en un hotel: la pueden utilizar durante toda la noche.
Los vecinos no solo sufren problemas de convivencia. También ha habido una gran subida de los precios en el barrio, lo que ha afectado a los residentes que se quieren quedar allí, como Carlos: "Ellos pagan más que nadie, y yo intento comprar un piso para el chico y te piden barbaridades"
Muchos vecinos de toda la vida ya han vendido sus casas y otros dicen haber recibido importantes ofertas por parte de empresas dedicadas a la explotación de apartamentos turísticos. Algunos se niegan a vender su hogar: "Por qué me voy a ir, si este es mi barrio", dice Blai.