Patraix, doce años después

Valencia

Recuerdo perfectamente ese 15 de mayo. Casi todos los periodistas de municipal cubríamos en Malilla un acto de campaña de la candidata a la reelección Rita Barberá. Fue allí donde conocimos la noticia y fue allí donde Barberá anunció el precintado de la subestación.

Tuvo que explotar la subestación para que Barberá moviera ficha. Hasta ese día había ignorado las reiteradas denuncias de los partidos de la oposición y lo que es peor, había despreciado las decenas de protestas de los vecinos en, quizás, la mayor contestación social que el PP había sufrido en sus 16 años de gobierno de la ciudad. Consciente del error el PP viró su posición: promovió que las nuevas subestaciones se construyeran soterradas y se sumó al resto de partidos que reclamaban el traslado de Patraix.

Doce años después de aquel fatídico algunos se preguntan qué hubiese pasado si el PP hubiese reaccionado antes… No sé si se habría evitado la explosión pero sí mucho sufrimiento.