"En EEUU me estoy formando como atleta, pero puedo hacerlo mejor y quiero más"
María Romero es de Getafe y estudia con una beca deportiva en Wychita
Fuenlabrada
A María le cuesta a veces encontrar la palabra exacta en español porque después de dos años estudiando Marketing en la Universidad de Wychita ya piensa en inglés. A los 18 años y después de terminar sus estudios en Getafe, lo tenía claro: quería seguir practicando deporte, en concreto atletismo, su pasión y no solo para pequeñas competiciones locales. Por eso, planteó su aventura americana en casa y con el apoyo de sus padres comenzó todo.
María es miembro del Club de Atletismo Fuenlabradacon, con quien sigue entrenando cuando viene a España. Envió sus notas y sus marcas deportivas a la Universidad y después de infinidad de papeleos, prueba de inglés y selectividad en EEUU, incluidas, consiguió una beca deportiva para sus estudios norteamericanos.
María Romero es de Getafe y estudia con una beca deportiva en la Universidad de Wychita, EEUU.
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“Me encantaría dedicarme profesionalmente al atletismo”, dice, pero tenía claro que “solo saliendo fuera, a una Universidad norteamericana” podía seguir estudiando y hacer deporte a alto nivel. “Aquí en España no se puede, no hay ayudas”, ni tradición deportiva universitaria. “La diferencia es que a los que tenemos beca deportiva, nos dan un trato diferente en ciertas cosas”. Por ejemplo, si tiene competición y coincide con un examen, el profesor está obligado a cambiárselo, les dan material deportivo, tienen ‘fisios’ a su disposición en cualquier momento…, “es otra cosa”, reconoce.
En la Universidad de Wychita estudia hasta las doce, hora en la que para a comer y después de las 13 h a las 15 h entrena, para trabajar por la tarde en un gimnasio del recinto universitario.
Lo cierto es que cuatro años antes un amigo deportista se fue un año a EEUU y la experiencia fue tan buena que María quedó fascinada, y como mujer “muy activa” que es y a la que le encantan los “desafíos”, decidió ir a por todas. La beca que le concedieron cubre el 75% de los gastos de sus estudios. Le permite comer en la cafetería universitaria, comprar los libros y pagar parte del alquiler de su casa, que ahora comparte con otra española.
María, ahora, compite en pruebas combinadas, pentatlón y heptatlón, y sueña con algún día dar el salto de la competición universitaria en la que está, a la profesional. Sabe que es complicado. “Allí sólo los atletas muy, muy buenos siguen haciendo deporte, los que pueden competir internacionalmente”. Sabe que ahora es “una atleta en formación”, pero también que es tajante: “puedo hacerlo mejor y quiero más”.