Condenan al Obispado de Cádiz por un despido como "represalia"
La trabajadora se quejó de que le duplicaron el turno de trabajo sin previo aviso y el Obispado de Cádiz y Ceuta, a raíz de la queja, decidió despedirla
El obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza / Obispado de Cádiz y Ceuta
Cádiz
El Juzgado de lo Social número 3 de Cádiz ha dictado una sentencia en la que obliga al Obispado de Cádiz y Ceuta a readmitir en su puesto de trabajo a una trabajadora que llevaba 18 años empleada en la diócesis y que había sido despedida como "represalia".
La trabajadora se quejó de que le duplicaron el turno de trabajo sin previo aviso y el Obispado de Cádiz y Ceuta, a raíz de la queja, decidió despedirla. Ahora, el Juzgado de lo Social número 3 de Cádiz ha condenado al Obispado a readmitir a la trabajadora.
La sentencia, contra la que cabe recurso, considera nulo el despido e insiste en que no había causas objetivas para despedir a esta empleada. Entre los hechos probados se hace constar que a la trabajadora se le comunicó el despido disciplinario en octubre de 2018 y que “dado que no se acredita causa alguna que justifique una decisión de despido, que se reconoce improcedente en el acto de juicio por la propia empresa demandada, debemos presumir que el despido se produce como acto de represalia por las pugnas judiciales existentes entre las partes litigantes".
El magistrado Francisco Borja Derqui-Togores de Benito indica en la sentencia que se trata de "un despido motivado como represalia por el ejercicio de un derecho fundamental” y que “no existe el más mínimo motivo que pudiera explicar alguna motivación de un despido sin causa alguna que lo justifique después de casi 20 años de prestación de servicios”.
Se da la circunstancia de que el Obispado de Cádiz también suspendió de empleo y sueldo al marido de esta trabajadora pero un juez también falló a favor del trabajador.
