Valverde de los Arroyos, paraíso natural y emblema de la arquitectura negra

Guadalajara

Valverde de los Arroyos es un enclave privilegiado. Ubicado a los pies del pico Ocejón, el más conocido de Guadalajara, y en plena ruta de la Arquitectura Negra, ofrece al visitante una mezcla perfecta de naturaleza, paisaje, tradiciones, entorno, cultura y gastronomía que lo convierten en uno de los lugares imprescindibles en cualquier paso por la provincia.

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Lo primero que impacta al visitante es la presencia del Pico Ocejón, una estampa reconocible que se ha convertido en lugar de referencia para muchos senderistas y aficionados a la montaña y que ha ayudado a la difusión de Valverde. Es una montaña del Sistema Central con una elevación de 2.048 metros sobre el nivel del mar.

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A menos altura, pero quizá más visitadas, se encuentran las Chorreras de Despeñalagua, un precioso paraje con varias cascadas donde el ruido del agua envuelve al espectador y ayuda a desconectar de la vida cotidiana. En primavera, si en invierno ha nevado abundantemente, el espectáculo es maravilloso.

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El camino de acceso a la chorrera es estrecho pero perfectamente transitable. Además, en el comienzo encontramos una gran pradera de césped natural utilizada como campo de fútbol y, a menudo, por muchos visitantes, también como merendero al aire libre.

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Pero, al margen del entorno natural, Valverde es conocido por su arquitectura. Como el resto de los pueblos del entorno, en sus casas y calles predomina la pizarra como material constructivo, un mineral muy característico que se extrae en la propia zona y que ha dotado a la comarca de una magnífica seña de identidad conocida como la Arquitectura Negra.

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Otro elemento importante en Valverde son sus tradiciones. En la zona han sabido conservar muchos símbolos de la cultura popular tradicional, destacando por encima de todas la fiesta de la Octava del Corpus (el domingo posterior al Corpus). Esta cita es famosa por sus danzantes, que ataviados con coloridos y llamativos trajes, bailan en el pueblo y a los pies del Ocejón.

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¿DÓNDE COMER?

En el propio municipio encontramos varios restaurantes con ese ambiente de naturaleza y pizarra de la comarca: Los Cantos, Mesón Despeñalagua y Hostal Rural Valverde. Conviene reservar antes para garantizarnos mesa aunque en los pueblos de los alredores (Majaelrayo, Campillo de Ranas, Tamajón, Galve de Sorbe) encontramos también establecimientos con platos similares.

También es destacable la gastronomía de la zona, donde destacan los asados propios de Castilla. En temporada, también hay que saborear las setas que ofrece esta zona, una de las mejores de la provincia para los amantes de la micología.

¿DÓNDE ALOJARSE?

Encontramos una decena de casas rurales para dormir o pasar una temporada con amigos y familia: El Mirador, Abuela Paca, Los Robles, La Alquería, Casa Migana, El Nido, Las Piquerinas, El Cárabo y el Hostal Rural Valverde. Al igual que en el caso de los restaurantes, la zona tiene una amplia oferta de alojamientos rurales con encanto especial. Cualquiera de ellos nos puede servir de cuartel general a partir del cual trazar rutas por una comarca especialmente agraciada por la naturaleza.

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Por todo esto y mucho más, Valverde fue uno de los primeros municipios en ingresar en la Asociación de los Pueblos más Bonitos de España, un selecto club que ha ayudado a esta pequeña localidad a consolidarse como un referente turístico en Guadalajara y en los alrededores de Madrid.