Armengol es más ambiciosa que esto

Palma

A cada folio demasiado calculado que la presidenta leía ayer en el Parlament, se me pasaba por la cabeza que Armengol es más ambiciosa que esto.

Ustedes me replicarán que este comentario sería el mismo aunque Armengol se hubiera atado el pañuelo revolucionario y hubiera propuesto la toma del palacio de Invierno.

O de Verano, en nuestro caso.

Admitamos el “derrotismo” y “cinismo” de las críticas, por nombrar las dos palabras que Armengol les adjudicó ayer.

Ahora bien, si la salud bucodental tiene un hueco destacado en un discurso de una hora sobre los remedios a la situación actual de Balears, a cambio deben haber quedado fuera cuestiones trascendentales.

Y que me perdone mi dentista.

Balears no necesita una presidenta preocupada y que mide sus palabras, sino arremangada y que no solo desciende al barro de Sant Llorenç.

Me replicarán que Armengol ha ganado así unas elecciones, pero tal vez su triunfo se deba al recuerdo de su discurso rotundo en la crisis del PSOE estatal.

Y que no se confíen los derechistas que hoy deben replicarle.

Si no toman precauciones, serán vapuleados por una presidenta más fiera de lo que traslucía su neutra comparecencia de ayer.