La economía gallega confirma su desaceleración

Santiago de Compostela

La economía gallega seguirá creciendo en 2019, pero más lento que el año pasado. Además, por primera vez en tres años, presenta un menor dinamismo que el conjunto de España. Son dos de las principales conclusiones del 'Informe de Coxuntura Económica' presentado por el Foro Económico de Galicia.

De esta forma, según el director del Foro, Santiago Lago, "se confirma el diagnóstico de la desaceleración" que han apuntado a lo largo de los últimos trimestres. Así, Galicia seguirá creciendo este año, con un ritmo del 2,3% según las previsiones del Foro, pero más despacio que en 2018, concretamente cinco décimas menos.

Además, y por primera vez en tres años, tal y como detalló Fernando González Laxe, coordinador del estudio, el "dinamismo" de la economía gallega, esto es, su ritmo de crecimiento, será inferior a la media estatal. Aún así el PIB gallego crecerá más rápido que la media de la Unión Europea (1,5%) y que la Zona Euro (1,2%).

Según explicó Lago, la ralentización de la economía gallega va asociada a un cambio de patrón del crecimiento. Pues si bien la demanda interna es positiva, caen las exportaciones, y de forma muy abrupta en el sector textil. Ni Lago ni el resto de sus compañeros entienden qué ha pasado para que cayeran un 25%. También se produjo una significativa caída en las exportaciones del sector automovilístico.

El sector industrial y el manufacturero se contraen, pero el crecimiento gallego se cimenta en el buen comportamiento del comercio, del transporte y de la hostelería.

Otro de los aspectos que hacen encender las alarmas según este estudio es la pérdida de población activa - aquella que busca de forma activa empleo - especialmente en el tramo de la gente más joven, aquellos que tienen entre 25 y 34 años, con una reducción del 2'6% interanual y del 24% desde 2014.

No obstante, el informe también destaca el buen comportamiento de Galicia en materia de desempleo, así como la disminución del número de familias sin preceptores o con todos los miembros del hogar en paro, mientras que crecen aquellas que tienen a todos sus componentes ocupados. Cae el desempleo de larga duración pero sigue preocupando el "elevado peso de la tasa de paro juvenil".

Sobre la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta los 900 euros, aseguran que tuvo un impacto positivo en el crecimiento económico con el impulso del consumo.