Rivera rechaza la invitación de Abascal para la reunión a tres con Casado
El líder popular había condicionado su respuesta afirmativa a que la reunión fuese a tres bandas
Europa Press
Murcia
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha intentado reconducir las negociaciones postelectorales proponiendo públicamente una reunión a tres con los líderes del Partido Popular y de Ciudadanos. Pero la pronta respuesta afirmativa de Pablo Casado estaba condicionada a que la reunión fuese efectivamente a tres y Albert Rivera acaba de descartar su participación, instando a sus eventuales socios políticos a seguir negociando a través de los equipos autonómicos.
Abascal había comparecido en Murcia con la intención de resolver la "grave situación" de la formación de gobierno en la Comunidad de Madrid y en Murcia. Una rueda de prensa en la que también ha cargado contra lo que ha llamado "chantaje" y el "apartheid" al que somete Ciudadanos a su partido.
Justo después, los presidentes de PP y Ciudadanos han recibido la invitación formal del líder de Vox y Pablo Casado no ha tardado en responder de forma positiva. De hecho, el propio Abascal ha agradecidoel gesto en redes sociales.
Abascal también había apelado a su "vieja amistad" con Rivera para convencer al dirigente de la formación naranja, que en su día ya participó en "actos y conferencias" organizadas por la organización Denaes, dirigida por el actual dirigente de Vox. "Espero que este llamamiento personal pueda surtir efecto", ha dicho. Pero finalmente no ha sido así.
El presidente de la formación ultraconservadora ha detallado que no pide "estar en el Gobierno, sino un acuerdo de investidura firmado por los tres partidos para pasar a la leal oposición". En su opinión, el acuerdo de gobierno firmado por el PP y Ciudadanos en Madrid significa que ambos persisten en el "error" de llegar a un pacto sin contar con Vox, lo que, a su juicio, debe llevar a la "reflexión de muchos españoles".
Abascal, que ha comparecido junto a Ortega Smith y Espinosa de los Monteros, ha asegurado que "aquí no hay ningún tipo de división", en referencia a la relación de la dirección nacional y la regional del partido, y ha denunciado "las mentiras de los negociadores del Partido Popular".
