Toma de posesión del nuevo Gobierno de Castilla-La Mancha

Toledo

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pedido a los nuevos consejeros y consejeras de su Gobierno una gestión al frente de sus departamentos en la que combinen la “jerarquía” a la hora de tratar con los “tantos cargos” de diferentes ámbitos con que cuenta la región y que preserven siempre la “cercanía” a la hora de afrontar los problemas de los ciudadanos de a pie.

Así lo ha subrayado durante el acto de toma de posesión de los miembros del Consejo de Gobierno de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha que se ha celebrado este lunes en el Palacio de Fuensalida, sede de la Presidencia autonómica.

El presidente regional ha recordado a los nuevos consejeros la importancia de tener en cuenta la jerarquía cuando se trata de representar a un Ejecutivo autonómico que gestiona en torno a diez mil millones de euros en la toma de decisiones, al mismo tiempo que se mantiene la “sencillez” en el trato con los castellano-manchegos, fórmula, ha asegurado, que ha caracterizado a su gobierno a lo largo de los últimos cuatro años.

“Luchamos contra la jerarquía en derechos”, ha explicado García-Page para quien “la dignidad y responsabilidad” que todos ellos han asumido en esta jornada, lo es no sólo con los departamentos que encabezarán, sino con todo el gobierno, con la región, con España y “fundamentalmente, con las leyes”.

 “Son máquinas con corazón”

 El presidente regional ha tenido palabras de reconocimiento para los miembros del equipo que le ha acompañado durante la legislatura 2015-2019, de quienes, ha significado que “son máquinas con corazón”, característica que también ha reclamado a los nuevos miembros del Gobierno regional.

Del mismo modo, García-Page ha tenido palabras de reconocimiento para los consejeros salientes de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, su antecesora, Reyes Estévez y las consejeras de Fomento, Agustina García y Elena de la Cruz, ésta última fallecida durante la pasada legislatura y a quien, ha asegurado “siempre echaremos en falta”.

Por último ha pedido a los nuevos consejeros la “dedicación completa” que exige la legislación castellano-manchega respecto a las incompatibilidades de los máximos responsables de las carteras regionales, así como que perpetúen la “limpieza” que siempre ha caracterizado a la Administración autonómica y que impulsen la “paridad” en la formación de sus equipos.

 “Esta legislatura podemos dar un salto definitivo en materia de agua”

 El presidente también se ha referido a la nueva consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, cuyas competencias asume Francisco Martínez Arroyo, “una figura de una solidez extraordinaria” del que “presumo bajito”, ya que como ha explicado García-Page, “el único miedo que tengo es que se lo quieran llevar a Madrid”.