La política se cuela en la fiesta

Tudela

Con optimismo ven las posibilidades de formar un gobierno las fuerzas políticas que negocian estos días un ejecutivo de progreso liderado por María Chivite. Optimismo como el que mostraba el socialista Ramón Alzorriz, secretario de organización del PSN, que manifestaba una convicción. "Es un gobierno común, un gobierno que muestre también la pluralidad que tiene la sociedad navarra, y eso es lo que estamos pretendiendo con toda esta negociación y con el próximo acuerdo que estoy convencido que vamos a alcanzar en breve".

Y aunque desde el pasado jueves las negociaciones públicas quedaron en suspenso, a la espera de tiempo solicitado por el PSN para reanudar la estructura del Gobierno a las demandas de sus socios, desde Geroa Bai, Barkos dice que trabajarán con la mayor premura. Y en cuanto a esa estructura del gobierno, Barkos matiza...que hace cuatro años..." yo solo me negué a gobiernos de cuotas, gobierno que efectivamente se repartiera un gobierno en vez de hacer un equipo".

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Podemos anunció que quería formar parte del gobierno. E Izquierda Ezkerra no hace cuestión de esa presencia.

El presidente de UPN, Javier Esparza, asume que Navarra puede ser gobernada por lo que él llama un pentapartito: es decir, las cuatro fuerzas aglutinadas en torno a María Chivite más EH Bildu... aunque admite que hay un grado de incertidumbre.

Y Esparza también observa con detalle lo que estos días está ocurriendo en el congreso de los diputados a la espera de la votación de mañana.

Y también muy atenta a los acontecimientos en las Cortes, la todavía presidenta en funciones, Uxue Barkos, que echaba en falta por parte de algunos portavoces el rango y el respeto debido a un debate de investidura.