Solidaridad y denuncia frente a un despido "sin motivos"
Los trabajadores de la empresa Josefina Arregui se concentran para denunciar la situación que vive la clínica
Pamplona
Solidaridad y denuncia. Dos objetivos que quieren conseguir los trabajadores y trabajadoras de Josefina Arregui, tras el despido de una de sus compañeras. Un despido “sin razones”, según Gorka Vierge, responsable de ELA en la Sakana. “Nos hemos llevado una decepción muy grande porque una de las trabajadoras que ha estado de excedencia voluntaria con reserva de puesto de trabajo al volver a su puesto de trabajo la despidieron sin ningún motivo. Es decir, la empresa incluso reconoce que no hay ningún motivo para despedirla y reconoce la improcedencia del despido”, cuenta Vierge.
Un hecho que ha marcado un antes y un después en las relaciones laborales, y abre la puerta del miedo al resto de trabajadores. “La sensación que se queda es que hoy puede ser una compañera y mañana otra. Y esto en la clínica no había pasado nunca porque es una clínica con una cierta vocación familiar, donde la gente se conoce de toda la vida. Ha supuesto un mazazo, un golpe, un jarro de agua fría a la tranquilidad y al clima laboral existente”, asegura el responsable de ELA en la Sakana.
Una residencia donde trabajan alrededor de 60 personas. Un centro pionero a nivel del país en el tratamiento a las personas mayores con demencia que presta servicio a toda la comunidad foral ya que tiene un concierto de 21 camas con el Gobierno de Navarra.