Labordeta, un hombre sin más
Un concierto en el que participarán los cantautores Luis Pastor y María José Hernández dará inicio este domingo en Canfranc al rodaje de "Labordeta, un hombre sin más", un documental que pretende homenajear al cantautor aragonés y que se estrenará en 2020, cuando se cumplirá el décimo aniversario de su fallecimiento
Zaragoza
En el acto organizado este domingo junto a la Estación Internacional de Canfranc por la Fundación José Antonio Labordeta, se proyectará también un video en el que se explica la vinculación del cantautor con esta localidad altoaragonesa cuya estación formó parte de su vida y de su lucha por su rehabilitación y reapertura de la línea ferroviaria internacional.
Fue en el valle del Aragón, en el que se ubica Canfranc, donde Labordeta escribió en 1974 su épico "Canto a la Libertad" según recuerda la Fundación en un comunicado.
El documental está dirigido por Gaizka Urresti y Paula Labordeta con guión de nuestro compañero Miguel Mena y Ángela Labordeta.
La cinta, que toma el título de uno de los poemas de Labordeta, tendrá una duración aproximada de 90 minutos y recordará la figura de un hombre polifacético que reivindicó Aragón con la voz principal de su viuda, Juana de Grandes, que además es presidenta de la Fundación que lleva su nombre.
El Labordeta más íntimo
Se grabará en diferentes localizaciones que fueron relevantes para Labordeta como Zaragoza, su casa natal y el Palacio de la Aljafería, Belchite, Huesca, Teruel o el Congreso de los Diputados y también Suecia para recrear el concierto que ofreció en 1969 en la Universidad de Lund, organizado por los estudiantes en solidaridad con los presos políticos de la España franquista.
En la cinta participarán amigos y compañeros de Labordeta y para ello a lo largo se celebrarán conciertos, proyecciones de vídeos y lectura de poemas en distintos lugares para combinar imágenes presentes y pasadas en las que aparecerá el cantautor en entrevistas o conciertos.
El punto de partida de la cinta será la multitudinaria despedida que Aragón le brindó tras su muerte en el Palacio de la Aljafería de Zaragoza, sede de las Cortes.