La dirección de La Paz cesa a la cúpula de urgencias

El Jefe de Servicio de Urgencias, César Carballo, y el Jefe de Unidad de Urgencias, Julio Cobo han sido cesados esta semana sin que la dirección del centro haya alegado más motivo que la "pérdida de confianza". Esta razón sería totalmente insuficiente para suspender a cualquier otro jefe de servicio del Hospital, pero en el caso de la urgencia se puede aplicar por la falta oficial de especialidad. España, con Portugal y Chipre, son los únicos países de la Unión Europea que no cuentan con esta especialidad.

César Carballo volverá a su puesto de urgenciólogo en el Ramón y Cajal y Julio Cobo ha sido reubicado en otra área de La Paz. Fuentes de su entorno aseguran que ambos se quedaron sorprendidos por la decisión de la gerencia. "No se lo esperaban después de cuatro años de trabajo muy duro en los que, al margen de las saturaciones provocadas por la falta de camas y personal, la urgencia se convirtió en un servicio modélico tanto en asistencia como, como en investigación, docencia e innovación.

Precisamente, uno de los posibles detonantes de su cese puede haber sido la petición de más profesionales que realizaron, de forma directa, a la consejería de Sanidad, después de solicitarlo reiteradamente a la dirección del centro. El departamento de Enrique Ruiz Escudero respondió con seis nuevos contratos eventuales de facultativos para la urgencia. "Eso no debió de gustar mucho al gerente", dicen algunos compañeros de los médicos cesados: "seguro que se sintió puenteado, pero es que la situación de falta de personal era insoportable". "Es verdad que para la dirección podían ser molestos porque reclamaban mejoras asistenciales para los pacientes, exigían que ninguno estuviera más de 24 horas en el box y que no se primara la lista de espera quirúrgica frente a los ingresos en urgencias."

En la Cadena SER hemos hablado con los dos médicos cesados y ambos han declinado hacer declaraciones. Desde el Hospital aseguran que el motivo es la reorganización del servicio, que su idea es sacar ambas plazas a concurso público y que mientras, ocupará el cargo un facultativo del hospital en funciones.