Alfonso: "Me voy con la sangre rojiblanca"
El expresidente se despide y cede el testigo a Mohamed El Assy
Punto y final. Alfonso García traspasa los poderes a Turki Al-Sheikh y el Almería cambia de manos después de dieciséis temporadas. En el acto de despedida, el expresidente estuvo acompañado por el nuevo director general, Mohamed El Assy, así como el resto de la anterior directiva. La rueda de prensa fue especial, con muchos aficionados, prensa, y representantes del proyecto saudí. El director deportivo, Darío Drudi, no tampoco se quiso perder el adiós de Alfonso García.
Su primera intervención fue extensa y reconoció que su esfuerzo fue por el bien del deporte almeriense, aunque la economía marcaba mucho: “Siempre lo hice con la mayor voluntad y sacrificio. Al que hace lo que sabe y puede no se le puede pedir más. Uno sabe realmente sus posibilidades”. Ha llegado una persona con más poder, presentando un proyecto ambicioso para el futuro cercano, y Alfonso solo podía dejar paso: “No guardo rencor hacia nadie ni nadie. Llegan nuevos tiempos, porque paso el testigo a Turki Al-Sheikh, que tiene más capacidad. Muchos han querido comprar, pero ninguno con este proyecto”.
Emotivo
Conforme avanzaba en su discurso, se iba emocionando más el exmandatario del club rojiblanco. Apunta que siempre estará a disposición de la actual propiedad para lo que necesite y acudirá al Mediterráneo cuando la agenda se lo permita, y es que, “seré el fan número uno del Almería a partir de ahora, porque he vivido cada momento intensamente, con viajes y miles de reuniones por esta entidad”.
Un lunar
La Ciudad Deportiva. Ese proyecto para la cantera nunca llegó a ser una realidad bajo su mandato, pero todo cambiará con la llegada de Al-Sheikh, que le prometió poner en marcha la obra y levantar la casa rojiblanca: “Fue mi asignatura pendiente y el nuevo dueño me dijo que la va a hacer. El proyecto de la nueva propiedad me entusiasma y pido que se le ayude. Vienen de una cultura diferente y harán cosas importantes para el club y la ciudad. Apuestan por Almería y eso hay que entenderlo”.
En las conversaciones Alfonso-Al-Sheikh se habló de un Almería de Primera División en un corto espacio de tiempo. Se ha pasado de hablar de permanencia a regresar a la élite del fútbol: “Por videoconferencia me dijo que hará un equipo muy grande siempre que se lo permitan. Por eso pido facilidades para Turki, ya que ellos ponen las ganas, la voluntad y el dinero. He dejado la entidad en muy buenas manos”.
El magnate saudí y sus personas de confianza se han puesto manos a la obra para levantar un Almería ambicioso, sin techo deportivo, hecho que obligó a Alfonso a dar un paso al lado: “Tienen ganas, capacidad y conocimientos, porque han tenido más clubes. Si las instituciones apoyan, ellos van a seguir aquí. He pasado el testigo a unas personas que saben de qué va esto”. Ha tenido muchas reuniones con compradores, pero ninguna llegaba a cuajar: “Era un paso que debía dar antes o después. Turki Al-Sheikh viene con ganas y capacidades. Siempre mantuve la ilusión, y he luchado hasta el final por el Almería”.
Su casa
Se llevó la ovación de los allí presentes Alfonso García, y fue después de unas declaraciones hechas con el alma, y es que un empresario que llegó al balompié almeriense en 2003, puso punto y final a su brillante etapa: “El color rojiblanco lo llevo en la sangre y mi corazón, seguiré viniendo al fútbol. No voy a guardar rencor de ningún tipo, sino que me marcharé como un almeriense más”.
Cerró analizando su gestión a lo largo de tantos años: “Hemos tenido más aciertos que errores, porque el Almería está en LFP. Alrededor del balón hay tantas cosas y no puedes controlarlas todas. El resultado final es bueno”. Alfonso deja huella en la ciudad.
Carlos Miralles
Redactor de Deportes de SER Almería. Lleva toda su carrera profesional en la SER.