De debutar contra el Unión Adarve a marcarle al Real Madrid
La perla de Catoira debutó en el Celta B, Selección Sub-18 y Celta
Vigo
Minuto 90 con 0-3 para el Real Madrid. Los de Zidane, con diez jugadores, disfrutaban ante un Celta que había bajado los brazos por el esfuerzo y el resultado. Marcelo gana línea de fondo y mete un pase de la muerte al área pequeña; lo salva Rubén con el pie y Olaza recoge el rechazo. Abre para Pape que tira una pared con Brais (todavía en área propia) y arranca en velocidad rompiendo la timida presión blanca. Progresa Pape con el balón en una conducción limpia por el carril central, cruza la divisoria, los tres cuartos de cancha y, cuando Ramos y Varane se cierran para cerrarle el tiro, aparece Iker Losada abierto en la derecha. Le pide el balón y tira un desmarque aprovechando que Marcelo se quedó. Desmarque bueno y con mucha intencionalidad. El canterano apenas llevaba tres minutos en el campo y recibió el pase de Pape en el pico derecho del área. Iker hace un primer control orientado, da dos toques cortos con el exterior de su pierna derecha para engañar a Ramos. Se abre, no para ganar línea de fondo, sino para abrir un ángulo de tiro muy ajustado. Cuando el de Camas no se lo espera, Iker Losada saca un latigazo abajo que sorprende a Courtois que nada puede hacer ante ese disparo raso y cruzado. Un debut histórico porque fue el primer jugador del siglo XXI que debuta y marca con el Celta en partido oficial. Ese es uno de los sellos del de Catoira: descaro; mucho descaro.
Fue el nacimiento profesional de Iker Losada tras nueve meses mágicos; nueve meses de crecimiento de un jugador que tiene muy buena pinta. Puede presumir de llevar nueve meses de escalada y de progresión continuada; de buenas noticias y de etapas importantes. Nueve meses que dejan a las claras que, si no se tuerce, el de Catoira puede dar muchas alegrías en el fútbol y en el Celta. Nueve meses que comenzaban a principios diciembre con Miguel Cardoso llamándolo para entrenar con el primer equipo. Y ahí estaba el imberbe juvenil haciendo rondos con Aspas, Brais o Hugo Mallo. En esos mismos días le llama Rubén Albés para viajar con el Celta B a Madrid. Y precisamente en la 15ª jornada debuta Iker Losada en el Estadio García de la Mata contra el Unión Adarve. Salió en el minuto 80 y cumplía otro paso más. A finales de ese importante mes de diciembre le llama la Selección Galega para el Campeonato de España de Autonomías que se celebró en Sanxenxo y en el que Losada se muestra como el talento que es. Llama la atención de muchos clubes y también de la Federación Española que le estaba ya haciendo un seguimiento.
Iker seguía creciendo en el División de Honor Juvenil que iba disparado en el Grupo I y, en febrero, le convoca Santi Denia para la Selección Española Sub-18. Con España gana la XLV Copa Atlántico en Las Palmas y, meses después, gana también la Europa Cup en Eslovaquia. Iker Losada ya había sido internacional Sub-16, pero ahora se estaba consolidando en la Sub-18 siendo un jugador muy del agrado y muy utilizado por Santi Denia. El catoirense acaba la liga juvenil como máximo goleador del Celta y se proclama campeón del Grupo I. Fran Escribá se lo llevó a hacer la pretemporada con el primer equipo, estaba muy contento con su implicación, rendimiento y adaptación e incluso ya dejó su sello con un gol ante el Unión Berlín en un partido que tuvo que suspenderse por la lluvia. Fue justo el día después de su cumpleaños. Otro sueño cumplido.
Centrocampista talentoso, ofensivo, muy técnico, con una derecha de muchos quilates, Losada se caracteriza por una gran conducción y una grandísima intuición para el desmarque, lo que le permite ganar espacios, tal y como demostró ayer. El día de la Lazio, los minutos que salió, los aprovechó para dejar tres o cuatro acciones con desmarques muy interesantes que le permitieron tener situaciones de gol cerca de la portería rival. Un 10 al que le gusta llegar como ha demostrado en el División de Honor Juvenil siendo el máximo goleador del equipo con doce goles.
En 9 meses ha cambiado todo para Iker Losada. De debutar contra el Unión Adarve en el Estadio García de la Mata a irse de Ramos y batir a Courtois en un Celta-Real Madrid en Balaídos. El Celta ha dado a luz a un talentoso jugador. Ahora le toca a él, al Celta, a Escribá y a los hermanos Montes que Iker Losada cumpla las etapas que son necesarias cumplir y que siga siendo el chico de Catoira que soñaba con debutar en Balaídos. Ya lo hizo. Vaya si lo hizo.