"Una macrogranja en Castrillo de Villavega generaría una tremenda contaminación"

Palencia

Provienen de los países del este, buscando una zona poco poblada, necesitada de mano de obra en la que colocar sus macrogranjas porcinas. "Les ofrecen el oro y el moro, pero la verdad es que no dejan más que algunos pocos puestos de trabajo", cuenta Pablo García, de la Plataforma 'Tú haces comarca', que junto con Ecologistas en Acción Palencia pretenden concienciar a la población de los efectos negativos que causarían la instalación de una macrogranja en la provincia de Palencia.

En torno a 4.000 cerdas madre llegarían a la macrogranja, con el objetivo de producir animales que puedan ser exportados a otros países. Desde los colectivos ecologistas sitúan el problema en una doble vertiente: de un lado, que el hecho de que los animales estén enjaulados, provoca que estemos consumiendo, de base, "un animal enfermo", lo que implica que lo ideal sería que cada ganadero de la comarca tuviera unos 300 cerdos; y, de otro, toda la contaminación que generan estas granjas.

Uno de los problemas que más preocupa a los colectivos ecologistas es la afección que estas macrogranjas pueden generar al medio ambiente. Para producir esta carne es necesario un volumen ingente de agua, que se mezcla con los purines para poder limpiarlo todo. El exceso de los purines provoca la contaminación de los acuíferos de los alrededores, al tiempo que el uso del mismo purin tiene difícil aplicación para los agricultores como abono, de tal manera que no tiene un carácter sostenible.

Además, desde Ecologistas en Acción, Javier Escudero opina que instalar una macrogranja tampoco sería un negocio a largo plazo beneficioso para la zona, pues la carne de cerdo no es la más consumida, salvo en países como China.