El Colegio de Veterinarinos de Palencia reclama la reducción del IVA de las clínicas de mascotas
Actualmente se encuentra en el 21%, siendo la única actividad sanitaria que tiene ese impuesto
Palencia
El Colegio de Veterinarios de Palencia reclama la bajada del impuesto del IVA del 21% para las clínicas de pequeños animales (de compañía), una situación que deja al colectivo veterinario como la única actividad sanitaria que tiene ese impuesto.
A renglón seguido, y en palabras del presidente del colegio palentino, Luis Fernando Román, piden que "se nos reconozca la labor que realizamos como profesionales sanitarios que llevamos haciendo desde el s.XIX, sobre todo los veterinarios clínicos, de animales de compañía y de producción, que realizan una labor sanitaria que repercute en las personas".
Y es que, los veterinarios, dentro del ámbito de la sanidad, realizan una labor de protección de zoonosis, es decir de aquellas enfermedades que transmiten los animales a las personas.
Por otro parte, acometen una labor de salud pública con un control de la seguridad alimentaria en todo establecimiento en el que se desarrolle una actividad alimentaria posterior al sector primario; desde los mataderos, garantizando que los animales que pasan al consumo humano no transmitan enfermedades ni riesgos químicos, físicos o biológicos.
Lo mismo ocurre también en industrias alimentarias o establecimientos de población de riesgo como residencias de ancianos, colegios, bares y restaurantes. Una actividad que desarrollan los servicios veterinarios oficiales de salud pública, en base a legislaciones nacionales y europeas.
Por último, desde el Colegio de Veterinarinos Palentino extienden una reclamación a los servicios autonómicos, pues no hay suficientes veterinarios para garantizar la salud de la fauna silvestre a nivel del campo, toda vez teniendo en cuenta que la última idea es la de proteger la salud de los consumidores, y muchos animales portan enfermedades graves como la tuberculosis del jabalí o la triquinilesosis, y que pueden llegar, si no se controla, del campo a la mesa.