Gobierno Vasco activa una mesa de seguimiento policial, pese a que no espera incidentes

Oiartzun

El departamento vasco de Seguridad ha activado este miércoles una mesa de seguimiento policial con motivo de la cumbre del G7 de Biarritz, y la "contracumbre" que distintos movimientos sociales celebran desde este miércoles en Irun, en el que formarán parte la Ertzaintza, la Guardia Civil, el Cuerpo Nacional de Policía, la Policía Foral navarra, la Policía francesa y la Guardia Municipal de Irun.

Asimismo, está previsto que este jueves se constituya paralelamente en San Sebastián un Centro de Coordinación Operativo (CECOR) en la Subdelegación del Gobierno en Gipuzkoa, también con motivo de la cumbre del G7, en un acto al que acudirá el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande Marlaska.

Según ha explicado Estefanía Beltrán de Heredia, consejera de Seguridad y encargada de supervisar esta mesa, el dispositivo (ubicado en Oiartzun) recibirá desde este miércoles y hasta el próximo lunes "información directa desde Francia y la frontera", así como del centro de control y gestión del tráfico ubicado en Txurdinaga (Bizkaia), con el fin de que las afecciones que produzca la cumbre sean las mínimas.

Todos los puntos de interés estarán monitorizados las 24 horas para "adoptar decisiones con la máxima agilidad de una forma lo más eficaz posible", y se realizarán "trabajos de control coordinados" entre efectivos, aunque la consejera también ha aclarado que "no se esperan altercados en este lado de la frontera", tras los contactos mantenidos con los responsables de la "contracumbre".

Por otro lado, Beltrán de Heredia sí ha avanzado que en estas fechas se espera una alta densidad de tráfico en las carreteras debido a la Operación Retorno por lo que, entre otras medias, se han habilitado un "carril para posibles emergencias", al tiempo que se mantiene la coordinación con la Dirección General de Tráfico, Cruz Roja, DYA, cuerpos de bomberos y distintos ayuntamientos.

La consejera ha recalcado además que, aunque no se prevé un cierre total del paso en esta zona, es algo que "no se puede descartar", por lo que es "un escenario que también se ha estudiado y se ha establecido dentro de la planificación".

En cuanto a la posibilidad de que se registren altercados fuera de la cumbre y contracumbre, ha avanzado que "la Ertzaintza ha hecho una operativa específica" con la activación de 4.000 agentes de todas sus secciones.