Castrillo de Duero se lleva la peor parte del aguacero

Peñafiel

Las lluvias torrenciales en la tarde del lunes se cebaron con Castrillo de Duero. Un total de cinco viviendas particulares, varias plazas del municipio y las calles del mismo sufrieron la crudeza del aguacero que dejó más de 50 litros por metro cuadrado. En el lugar se personaron los Bomberos de la Diputación de Valladolid que tuvieron que achicar agua y actuar ante la gravedad de la situación.

En la mañana de este martes podían observarse las consecuencias devastadoras del agua. La alcaldesa de la localidad, Mónica Lucas, muestra su preocupación ante la gravedad de los daños. "Varias familias han tenido que abandonar sus hogares", apuntaba debido a que "el agua y el lodo se ha colado en sus casas". La primera edil añade que "ahora estamos pendiente tanto el Ayuntamiento, como los particulares de que lleguen los peritos para solucionar todos los aspectos administrativos".

ACHIQUES QUINTANILLA DE ARRIBA

Por otro lado, las lluvias afectaron también a la localidad de Quintanilla de Arriba donde los Bomberos de la Diputación de Valladolid tuvieron que achicar agua en un establecimiento de la localidad, como actuación más destacada.

PEÑAFIEL SIN INCIDENCIAS GRAVES

Mientras en la propia localidad de Peñafiel el agua apenas provocó trastonos más allá de varias calles anegadas de agua y tierra, algunas vallas caídas y la pérdida de una línea de luz en las farolas de una vía. "No se han producido grandes trastornos" afirma el primer edil, Elías Arranz.