Las administraciones catalanas gastan 26 millones de euros al año en asesores elegidos a dedo

Barcelona

El organismo que destina más dinero a cargos de confianza es, lógicamente, el más grande. La Generalitat de Catalunya se gasta 10 millones de euros anuales, incluyendo asesores de protocolo, responsables de relaciones institucionales, miembros de los departamentos de comunicación, y jefes de gabinete con sus adjuntos.

A la Generalitat le sigue el Ayuntamiento de Barcelona, que destina cinco millones y medio para pagar su centenar de cargos de confianza.

Respecto las tres siguientes ciudades de Cataluña por población: hay diferencias entre Terrassa y Badalona, que tienen prácticamente la misma población: en la cocapital del Vallès Occidental trabajan cinco asesores que cuestan 266.000 euros, mientras que en Badalona hay cinco veces más: 27 cargos de confianza, que suponen más de un millón anual a las arcas públicas. Además, la partida destinada a pagar el sueldo ha subido un 12% respecto a la legislatura anterior.

L'Hospitalet de Llobregat es la excepción. La segunda ciudad de Cataluña ha reducido el número de asesores, de 22 a 16, y eso que fuentes del consistorio insisten en que podrían tener, por población, hasta 24.

Otro ente que paga más respecto la anterior legislatura es la Diputación de Girona: destina un 25% más que hace un año. Además, han incrementado el número de asesores hasta el máximo previsto en la ley: ahora hay 27, uno por cada diputado. En las diputaciones de Tarragona y Lleida también trabajan 27 asesores, pero, a igual número, pagan diferente: en Lleida se destinan 1,3 millones y en Tarragona no se llega al millón.

En el Área Metropolitana de Barcelona hay listados 42 asesores que cuestan 2,1 millones. Es un 9,5% más que en 2018.

Finalmente, los grupos del Parlament tienen 16,2 millones de euros de subvención anual para destinar a lo que quieran, incluidos asesores y demás cargos de confianza.