Azcón busca un cambio de estrategia con la deuda del tranvía

Zaragoza

El Ayuntamiento de Zaragoza empieza a asumir que no cobrará la deuda del tranvía. Estas son palabras del alcalde, Jorge Azcón, en el programa La Rebotica, de Radio Zaragoza, donde ha señalado la nueva movilidad como una vía para recuperar esas aportaciones.

La reforma de La Romareda

Además, Azcón aboga por la fórmula público - privada para financiar el estadio de La Romareda y se fija en el ejemplo del nuevo San Mamés. El papel lo aguanta todo y los informes técnicos de la DGA que impiden pagar los 35 millones de la deuda al ayuntamiento suponen un callejón al que el consistorio asume que no va a encontrarle salida, como ha deslizado el alcalde Jorge Azcón, en Radio Zaragoza. A lo que ha añadido que "será dificil intentar que nos pague lo que nos dijo que nos iba a pagar".

Por eso, el consistorio quiere salirse de los railes y dar un poco más de vuelta. Está en ciernes el Plan de Movilidad de Zaragoza y con ciertas decisiones, la DGA puede aportarle al ayuntamiento de una manera algo más indirecta. Azcón ha señalado que intentará "abrir nuevas formas de colaboración en la movilidad entre el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento" y confía en el "proyecto de la nueva movilidad".

El lunes 9 de septiembre tendrá lugar una reunión con el Presidente del Gobierno autonómico, para ver, entre otras cosas, cómo recibe esta premisa Javier Lambán. Y el mismo compromiso quiere Azcón de la DGA para la reforma de La Romareda. "La colaboración público privada", segun ha insistido, es la fórmula idónea, con un ejemplo, el del nuevo San Mamés en Bilbao.

El San Mamés como referente

Bilbao construyó un nuevo estadio y Zaragoza lo quiere reformar. En el caso bilbaíno, una sociedad se hizo cargo de las obras. Son partícipes de ella la Diputación Foral de Vizcaya, el Gobierno Vasco, una entidad bancaria, el propio club y el ayuntamiento, con algo menos del 6% de participación.

Esa sociedad ha cedido 50 años al Athletic la instalación, aunque debe dejárselo al resto de socios para sus actividades y con una serie de mejoras urbanísticas asociadas.

El problema de la economía municipal

Pocas o ninguna alegría se lleva el ayuntamiento si mira a la economía interna y externa, y a pesar de ello Azcón mantiene que "no subirá impuestos". En medio, la catástrofe que supone la falta de Gobierno en España y la dificultad para lograr un acuerdo de presupuestos municipales para 2019.

El alcalde recuerda casi a diario que Zaragoza es la ciudad más endeudada de España, y a pesar de esas estrecheces, sigue firme en los mismos impuestos, e incluso algunos más bajos. 

Tiene claro que habrá nuevos comicios nacionales y coincide con el presidente autonómico de "la catástrofe" que supone frenar proyectos por el bloqueo de fondos en Madrid mientras siga el gobierno en funciones. Y concluye que "no se traduce en recortes". 

Y pasado el verano y con el consistorio en marcha, el ayuntamiento tiene que empezar a pensar en elaborar los presupuestos a pesar de todo lo que puede cambiar después los planes. Y ahí, el alcalde Azcón abre el campeonato de la estabilidad.