El presidente de la CHC anuncia la licitación de tres proyectos para restaurar los ríos

Santander

El Gobierno de Cantabria, la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) y los ayuntamientos del río Saja han acordado crear un grupo de trabajo para solucionar los problemas de mantenimiento, limpieza y defensa de inundaciones de los cauces de los ríos de Cantabria, en general, y de la cuenca del Saja, en particular.

Así lo han acordado en la reunión que han mantenido este viernes el presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla; el presidente de la CHC, Manuel Gutiérrez; el comisario de Aguas, Jesús María Garitaonandia y los alcaldes de Reocín, Cabezón de la Sal, Mazcuerras, Ruente, Cabuérniga, Los Tojos y Alfoz de Lloredo.

Revilla, ha agradecido a Manuel Gutiérrez que se haya desplazado a Cantrabria para tratar con los alcaldes de "las zonas más afectadas" y ha destacado que el presidente de la CHC "conoce bien el problema" y tiene el "ánimo de dar una solución, que en parte es económica".

"Ahora hay una cantidad de material sedimentado en los ríos, fruto de las inundaciones de enero" ha señalado Revilla, alertando de que "si viene una situación climática como aquella podría haber desbordamientos en toda Cantabria".

Revilla ha valorado que se cree una comisión "a tres bandas" para consensuar cuales son las prioridades, al margen de que ya se puedan llevar a cabo las actuaciones más perentorias.

Durante el encuentro, la CHC ha puesto de relieve las labores de limpieza y conservación de cauces llevadas a cabo desde finales del 2018 y hasta la fecha en los ríos de Cantabria, y que supondrá actuar en más de 70 zonas -las más necesitadas-con una inversión aproximada de 2 millones de euros, hasta final de año.

En esta línea, el presidente de la CHC ha anunciado la próxima licitación de tres proyectos de restauración de márgenes de ríos por un importe en torno a los 800.000 euros.

Estas actuaciones se localizan en el Río Saja, en los núcleos de Renedo y Terán de Cabuérniga; en el Río Quivierda, en el núcleo de Carmona, también en el municipio de Cabuérniga; y en el Río Besaya, a su paso por los núcleos de San Cruz y Arena de lguña, en los municipios de Molledo y Arenas de lguña,

Además, la CHC se ha comprometido con el Gobierno Cántabro y los alcaldes a realizar actuaciones de conservación en los cauces de los ríos de forma continuada y en coordinación con todas las administraciones implicadas.

Dichas labores se realizarían en función de las necesidades concretas que surjan y supondrán una inversión anual de al menos 1 millón de euros.

La CHC ha trasladado a los alcaldes que las labores de conservación que lleva a cabo en los ríos, siendo necesarias, no impiden -en situaciones de avenidas extraordinarias- el desbordamientos de los ríos, aunque su sección esté completamente libre de acarreos y vegetación.

Como ejemplo de ello, se ha apuntado que en el caso del río Saja, sería necesario un muro de 5 metros a lo largo de sus márgenes para evitar su desbordamiento en el caso de producirse una avenida extraordinaria.

Por ello, la CHC resalta la necesidad de realizar actuaciones específicas de protección en zonas urbanas susceptibles de poder inundarse. En este sentido, se recordó que las competencias para la defensa de dichas zonas urbanas están trasferidas por el Estado al Gobierno de Cantabria desde 1984.

No obstante, en el marco de colaboración institucional, la CHC ha redactado el proyecto de protección de Cabezón de la Sal y Mazcuerras, que alcanza un importe de 6 millones de euros. Es intención del Ministerio para la Transición Ecológica cofinanciar las obras con el Gobierno de Cantabria, que es quien tiene las competencias para su ejecución.

Para ello tiene previsto incluir una partida al efecto en los próximos Presupuestos Generales del Estado.