Olmo Figueredo: "Estamos en una nube"
Uno de los productores de 'La trinchera inifinita' explica las claves del éxito de la película
Cádiz
Hace 17 años que Olmo Figueredo y Manuel H. Martín decidieron dejar la teoría y pasar a la práctica. Crearon en Sevilla su productora La Claqueta, que atraviesa un momento de oro. El Festival de Cine de San Sebastián les ha valido para proyectar las primeras imágenes de El verano que vivimos, rodada en Jerez, que se estrenará el año que viene. Para proyectar Adiós, un trepidante thriller de Paco Cabezas como director y de Mario Casas como protagonista. Y, sobre todo, para descubrir al mundo La trinchera infinita, de los vascos Jon Garaño, Aitor Arregi y José Mari Goenaga. Se han llevado seis premios y la sensación de estar ante una de las películas del año.
Revista Cultural de Andalucía 5 de octubre
05:14
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Pregunta. ¿Con qué sensación ha vuelto de San Sebastián?
Respuesta. Buf. Estamos en una nube, la verdad. No ya por los premios porque realmente los premios son un regalo, les damos la bienvenida, y los recibimos con un cariño brutal. Pero el día de la proyección, el domingo allí en San Sebastián, el momento de entrar en el Kursaal, la ovación al final. No sé. Uno pone mucho esfuerzo haciendo una película y después de tantos años ves que el público la acoge con tanto cariño y mimo es vivir, pues eso, un sueño.
P. ¿Qué cree que tiene la película que está gustado tanto?
R. Eso nos estamos preguntando. Curiosamente, ha habido como una unanimidad de público y crítica y eso suele ser bastante complicado. Es una de estas películas especiales que ha enganchado muy bien con la gente. Creo que tiene mucha humanidad, transmite realismo, te permite conectar muy bien con los personajes. Aunque habla de algo lejano en el tiempo, como es la posguerra, metafóricamente es una alegoría sobre el miedo, y eso conecta mucho con la gente, que puede imaginarse cómo se sentiría ese momento. Y también es una historia de amor de un matrimonio por 33 años, un matrimonio que pasa por todas las etapas, enamoramiento, peleas, odio y costumbre. Son sentimientos y elementos que forman parte de la vida cotidiana y hace que la gente se identifique mucho con los personajes.
P. ¿Cómo llegó su productora, La claqueta, a este proyecto?
R. Curiosamente, surge de otro proyecto. En 2008 empezamos a desarrollar el documental 30 años de oscuridad, sobre distintos topos, aunque centrado en Manuel Cortés, alcalde de Mijas. Lo coproducimos entre tres, entre ellos, con una empresa vasca, Irusoin. Funcionó muy bien. Lo compró Canal +, llegó a salas, estuvo nominado al Goya, se proyectó en San Sebastián, y allí los directores de esta película lo vieron y nos dijeron que querían hacer una ficción. A partir de ahí empezamos a desarrollarla. Hicimos modificaciones porque era imposible, por razones creativas, seguir la historia sobre un topo real, porque necesitábamos que la narración fuera más flexible. Tuvimos que cambiar algunas cosas. Decidimos crear la historia de un topo ficticio, pero con elementos comunes de otras historias reales de topos en España, especialmente, en nuestra comunidad, Andalucía.
P. Jon Garaño, uno de los directores de La trinchera infinita, salió a recoger en San Sebastián el premio a la mejor película vasca y en su discurso de agradecimiento reivindicó que esta es una película andaluza. ¿Qué le pareció ese mensaje?
R. ¿Sabes lo que pasa? Como llevamos tanto tiempo trabajando con ellos y los conocemos tan bien, que sabíamos que podían decir algo así, porque es gente muy humilde, súper cariñosa. Las coproducciones suelen ser algo complicado, pero trabajar con ellos es muy sencillo. Desde el minuto uno decidimos que fuera una historia andaluza, donde era fundamental tratar el habla andaluza con un respeto total. Ellos venían de hacer películas (Loreak, Handía) donde el euskera fue tratado con rigurosidad. Y aquí ocurrió lo mismo. Ha sido un proceso precioso. Yo echo la mirada atrás y solo tengo buenos recuerdos. Y, efectivamente, fue muy bonito que en un premio vasco se dijera que esta es una película andaluza.
P. Y el andaluz muy presente...
R. Por supuesto. Porque al final es un retrato sociológico de Andalucía durante 33 años. Los espectadores van a encontrarse con muchos guiños que van a recordarle su niñez, su adolescencia. Vas viendo cómo se va transformando esa casa, cómo va cambiando el atrezo, cómo va mejorando el pueblo, cómo va entrando el dinero a España. Es ese viaje en el que los espectadores entran, con el realismo que te hace sumergirte completamente, como si estuvieras dentro del agujero en el que se esconde nuestro topo.
P. Dolor y Gloria, Madre, Mientras dure la guerra... Va a ser una temporada de premios reñida.
R. Los premios ya llegarán. Si, de repente, nuestra película, según el criterio de los académicos está ahí, pues bien, pero lo importante es el público. Yo me alegro mucho de que Mientras dure la guerra esté número uno en taquilla, o del premio de Dolor y Gloria en Cannes, o de Madre, en Venecia... Es positivo para el cine español. Además, quedan muchos estrenos, por ejemplo, de directores andaluces. Queda lo nuevo de Benito Zambrano, Paco Cabezas... Es bueno porque son historias españolas, locales, que van a transportar a espectadores de cualquier parte del mundo a nuestras costumbres, a nuestros lugares, a nuestra forma de ser... y quizá esa gente pueda venir a visitar nuestro país, a hacer turismo, y a seguir generando riqueza. Eso lo buscamos la gente del mundo del cine: contar historias, pero también contribuir a generar riqueza directa e indirecta.
P. La Claqueta ha hecho doblete en San Sebastián porque también ha presentado la película Adiós, del sevillano Paco Cabezas.
R. Sí, ha sido un San Sebastián muy completo. Estuvimos también en la gala de RTVE presentando Adiós, con un elenco fantástico con Mario Casas, Natalia de Molina, Ruth Díaz, Carlos Bardem... Es el regreso a casa de Paco, de quien se fue a hacer las Américas y se ha convertido en uno de los mejores directores de series de Hollywood. Trae una historia enteramente rodada en Andalucía, en concreto, en Sevilla. Es un thriller trepidante, que va a hacer las delicias del público. Se estrena el 8 de noviembre.
P. Y está destacando también la presencia y el poderío de los actores andaluces. ¿Lo ve así?
R. Es que muchas veces no sabemos lo que tenemos en Andalucía. Tenemos grandísimos actores, actrices, mucho talento joven que está saliendo. Si salen muchos proyectos aquí, tienen más oportunidades de no tener que irse fuera. Tenemos una capacidad para montar series y películas con actores de nuestra tierra. La verdad es que es un privilegio trabajar aquí, y rodeado de talento.
P. Además, se proyectaron en San Sebastián las primeras imágenes de El verano que vivimos. ¿Está siendo vuestra mejor época? ¿Habéis cumplido vuestro sueño?
R. Sí, cuando montamos la empresa Manuel H. Martin y yo en 2002 poco podíamos imaginar esto. Nuestro sueño era hacer cine, pero no sabíamos cuándo iba a llegar. Es verdad que no hemos tenido prisa. Tenemos la fortuna de haber ido consolidando la empresa pasito a paso, participando en Andalucía, en España, con coproducciones internacionales. Y, de repente, te ves en un Festival de San Sebastián en el que proyectas dos películas y presentando otra, con Antena 3, Warner, Bambú, con Javier Rey, Blanca Suárez, Pablo Molinero, rodada en Jerez, que se verá el año que viene. Es un sueño hecho realidad e intentaremos mantenernos en ese sueño lo máximo posible, con la mayor humildad. Y compartirlo con cuanta más gente se pueda, porque esto no sabes lo que dura, pero es importante compartir y celebrar los éxitos. Porque vendrán otros momentos no tan buenos e intentaremos que otros nos echen una mano.
Pedro Espinosa
En Radio Cádiz desde 2001. Director de contenidos de la veterana emisora gaditana. Autor del podcast...