Blackbinder, música sin papeles
Uno de sus fundadores, Carlos Piñuela, visita La Ventana de la Empresa con una tecnología que supera 300 años de partituras en papel
Pamplona
Las nuevas tecnologías adaptadas para la música. Es el objetivo que se marca la empresa navarra Blackbinder, que desde 2015 desarrolla una tecnología para sustituir a las partituras en papel que utilizan los músicos. Su director de I+D+i, Carlos Piñuela, en La Ventana de la Empresa Navarra, remarca que no se trata de una partitura digital sin más, sino que lo que hace es sustituir el sistema de paginación por uno que sigue el ritmo de la música en la pantalla. "Es un sistema similar al prompter en televisión, nada que ver con un pdf en una tablet", señala Piñuela.
El trayecto de Blackbinder comenzó en 2015 cuando Piñuela, que trabajaba como profesor de música, pensó en un sistema que sustituyera la partitura en papel con la que han trabajado los músicos y estudiantes desde hace siglos. Curiosamente, nadie se había puesto a desarrollar un sistema de este tipo y Blackbinder se ha hecho con la patente para la mayoría de países de Europa y América. Orquestas sinfónicas como la Sinfónica de Navarra, la de Euskadi o la de Radiotelevisión Española, han sido las primeras en probar la tecnología de Blackbinder, aunque posteriormente han sido varios conjuntos europeos y de Estados Unidos quienes la han adoptado.
Blackbinder es también un instrumento muy práctico para la enseñanza de música en escuelas y conservatorios. Actualmente 8 personas trabajan en esta empresa cuyo reto es lograr que su tecnología se convierta en el estándar de lectura musical y se abandonen las partituras de papel o paginadas de manera definitiva.