Diez años después, la vida sigue siendo maravillosa

Vigo

'La vida puede ser maravillosa' o un gritado'¡jugón!' es, entre otras muchas, la herencia que nos ha dejado Andrés Montes, de cuyo fallecimiento se cumplen hoy 10 años. Además, apodos a jugadores de aquella lejana NBA que él, de la mano de Antoni Daimiel, acercó a miles de aficionados que trasnochaban para escuchar cómo narraba con ese estilo tan personal los partidos en Canal Plus. Hablamos con su compañero de batallas detrás de los micrófonos, Daimiel, un apellido que Montes, de padre vigués, tenía en la punta de la lengua constantemente para rematar las ingeniosas frases que acompañaban el baloncesto.