El Registro Civil detecta "empadronados express" para jurar la nacionalidad
Los extranjeros que tienen ya concedido este derecho utilizan la picaresca para realizar el trámite en Aragón. En ciudades como Madrid y Barcelona, las citas se reservan, al menos, medio año después y en Zaragoza apenas es un mes
Zaragoza
El Registro Civil de Zaragoza se ha topado con la picaresca. En los últimos meses lucha contra los "empadronamientos express" para jurar la nacionalidad española. En este organismo han detectado casos de extranjeros que, viviendo en otras comunidades, se empadronan en Aragón para acortar sus plazos puesto que es un trámite eterno en las grandes ciudades; en Zaragoza se resuelve en un mes. El registro se ha visto obligado a pedir un justificante que demuestre la vecindad al menos durante dos o tres meses. En muchas ocasiones, detrás hay necesidades como la de presentarse a oposiciones (es indispensable ser español) o realizar algún viaje.
Jurar o prometer la nacionalidad es el último papeleo antes de conseguir el DNI. Una vez que el Estado concede la nacionalidad española, los extranjeros deben pedir una cita en el Registro Civil. Aquí surge la pillería que están sufriendo en Zaragoza y para el que han tenido que tomar medidas para evitar un embudo. "Se ha detectado hace unas semanas, según nos han contado los responsables, que ante la imposibilidad de jurar en un plazo razonable, que personas de Madrid o Barcelona, aprovechando sus conexiones familiares o sus anteriores contactos en la ciudad querían trasladar su domicilio formalmente a Zaragoza para realizar la jura. Por eso, de manera preventiva, en el Registro piden un empadronamiento de, al menos, dos o tres meses", relata el abogado zaragozano Álvaro Villacampa, de extranjeria24h.com.
Esta situación ocurre porque, al incremento de las concesiones de nacionalidad que se está produciendo, le ha seguido un embudo en los registros de las grandes ciudades. "Ha pasado que, con este aluvión de resoluciones, el problema es encontrar una cita pronto. En algunas ciudades grandes se van a los seis, ocho o nueve meses", apunta Villacampa. Este letrado reconoce el buen trabajo de los profesionales de la capital aragonesa. Las citas que en grandes ciudades están en más de medio año, aquí se solucionan en un mes. Cuando van a jurar la Constitución española, también inscriben su nacimiento en el país de origen y reciben el documento en el momento, cuando en otros registros tardan varios días o semanas. Por eso el abogado Álvaro Villacampa alaba el trabajo aquí: "Zaragoza funciona muy bien, tenemos funcionarios muy competententes. Hay un retraso de un mes, que es el mínimo".
Recta final del plan intensivo
El Gobierno Central tiene implantado un plan intensivo de nacionalidad que termina el 30 de noviembre y que está concediendo este derecho de manera aleatoria, lo que genera situaciones injustas entre los solicitantes. A la espera de los datos de 2019, el año pasado, en Aragón se convirtieron en españolas casi 2700 personas. Los bufetes de abogados reconocen el incentivo que está suponiendo que haya casos resueltos incluso con apenas unas semanas. Es una especie de lotería a la que juegan decenas de miles de expedientes, que sufrieron un grave atasco de más de 2 años hasta que, poco a poco se está sustituyendo por la tramitación online. Villacampa reconoce que "Se esta resolviendo aleatorio, la versión oficial es que se ha repartido el trabajo para que los funcionarios teletrabajen. Hay gente que dice que esto debería resolver todo el atasco antes del 30 de noviembre, pero lo veo imposible. Además, veremos después la situación política qué nos depara". A pesar de la buena voluntad de haber dotado de más medios en el Ministerio, los profesionales lo contemplan como un sistema injusto por el que pueden ver como el vecino que presentó su solicitud hace tres meses obtiene la nacionalidad antes que alguien que lo hizo en 2016. Y se generan anécdotas incluso familiares de "familias que han presentado la documentación prácticamente idéntica y a la vez, y les han concedido la nacionalidad a todos menos a uno". De las casi 2700 nacionalizaciones en Aragón en 2018, 800 se otorgaron a marroquís, más de 220 de Nicaragua y casi 200 de Colombia.