El PSOE califica de despropósito el despido de una trabajadora del Patronato Municipal de Deportes
Se reconoce el despido improcedente, pero no puede ser readmitida porque el contrato fue irregular
Polémica por el despido de una trabajadora en el Patronato Municipal de Deportes de Palencia / Radio Palencia
Palencia
El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Palencia ha calificado de despropósito absoluto el despido de una trabajadora del Patronato Municipal de Deportes que, pese a considerase improcedente, no será readmitida por considerarse que el contrato estaba formalizado de forma irregular. Según se apunta desde el PSOE, la trabajadora ha ganado una sentencia judicial en la que se admite un despido improcedente y, por tanto, la obligación de ser readmitida o indemnizada.
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La sorpresa, a juicio del PSOE, ha llegado cuando desde el Ayuntamiento se aduce la imposibilidad de la readmisión por tratarse de un contrato realizado de forma irregular. La portavoz socialista, Miriam Andrés, solicita responsabilidades técnicas o políticas al Equipo de Gobierno al considerar un total despropósito el hecho de que un contrato mal hecho por el Ayuntamiento no puede ser la causa de que una trabajadora se vaya a la calle.
En esta ocasión un error surgido desde el consistorio termina pagándolo una trabajadora a la que se anula el derecho que los propios tribunales han reconocido, lo cual supone un total caos en la gestión de personal del Equipo de Gobierno. A este despropósito se une además la necesidad imperiosa que tiene el Patronato de los Deportes de cubrir esas labores que realiza la trabajadora a la que siguen llamando para hacerlo.
Desde el PSOE se pide que se busque la solución para que permita el cumplimiento de una sentencia judicial en cualquiera de las opciones que recoge la resolución, lamentando que siempre sea el trabajador de “a pie” el que pague las consecuencias. Los argumentos esgrimidos desde el Ayuntamiento sobre la resolución es que es más costosa la opción de la readmisión al tratarse de una plaza no amortizada y, paradójicamente, seguirán llamando a la trabajadora y pagando incluso sus horas extras, lo cual lleva a potenciar la precarización del empleo.
