El Colegio de Ingenieros de Caminos realizará una prueba de carga en la pasarela de Labrit para conocer su estado "real"
Pamplona
El colegio de ingenieros de caminos, canales y puertos de Navarra llevará a cabo una prueba de carga en la pasarela de Labrit en Pamplona.
Las pruebas comenzarán este mes de noviembre y la entrega del informe será en enero de 2020. El coste es de 50.000 euros. El trabajo comenzará con una prueba de carga dinámica, en la que valdrán tres personas de peso medio para determinar las frecuencias de vibración reales de la estructura.
El Colegio de Ingenieros se encargará de realizar las inspecciones, los ensayos y las pruebas, entre ellas una de carga, sobre la estructura de la pasarela del Labrit para conocer su estado "real".
Así lo ha anunciado el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, quien ha destacado que con esta medida el equipo de gobierno municipal "mueve ficha" para que "se inicie la reapertura de la pasarela".
Ha recordado el alcalde que el expediente sobre la pasarela se encuentra en sede judicial y ha destacado que el "objetivo" del gobierno municipal sobre esta infraestructura es "doble", por un lado, la reapertura de la pasarela y, por otro, que "no nos cueste un solo euro a las arcas municipales".
"Hay unas responsabilidades e informes contradictorios en el expediente, por lo que con la prueba de carga que se va a iniciar queremos tener la certeza de qué le pasa a la pasarela, cuáles son las medidas que se pueden adoptar para su refuerzo y reparación y ejecutarlas", ha explicado.
LOS TRABAJOS
Por su parte, el decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Joaquín Salanueva, ha sido el encargado de detallar los trabajos que se van a realizar en la pasarela con los que buscan "arrojar luz diciendo cosas muy concretas basadas en pruebas reales".
El concreto, el trabajo que se va a realizar comenzará con una inspección de la pasarela y la toma de datos estructurales a partir de la realización de tres ensayos. Uno será una prueba de carga dinámica, obteniendo las frecuencias de vibración reales de la estructura.
Salanueva ha explicado que se ha optado por una prueba de carga dinámica en vez de estática (colocando peso), ya que "como aquí se está dudando muy seriamente de la capacidad de la estructura, se ha pensado que no era conveniente hacer cosas que pudieran llegar a producir la ruina de la estructura".
Según ha indicado, la diferencia entre ambas pruebas es "tan sustancial" que "para hacer una prueba dinámica de esta pasarela es suficiente con que pasen tres personas de peso medio (70 kilos) sobre ella, una por cada metro de anchura". "Con tres personas se va a conocer muchas cosas sobre cómo está funcionando realmente esa infraestructura. Lo que tenemos que hacer es excitar esa estructura para que manifieste un estado de vibración", ha comentado el decano del Colegio de Ingenieros.