Momentos de tensión en la planta de Araluce al anunciar la dirección su cierre
Los trabajadores a quienes la dirección ha anunciado, según denuncian, el despido de los 141 empelados se han concentrado desde la madrugada frente a las puertas para impedir la retirada de una de los últimos encargos realizados
Bilbao
La Ertzaintza se ha visto obliga a intervenir durante el desarrollo del desalojo de la empresa. Los trabajadores a quienes la dirección ha anunciado, según denuncian, su despido se han concentrado desde la madrugada frente a las puertas para impedir la retirada de uno de los últimos encargos realizados antes de que se decrete el despido de la platilla compuesta por 140 trabajadores y el cese de la actividad de la empresa.
La dirección de Batz, anunció en octubre su intención de despedir a los 140 empleos de la planta de Igorre "por falta de viabilidad". Los empleados denuncian que esta madrugada han sido expulsados sin previo aviso y han decretado cierre patronal. Batz reiteró su intención de liquidar la compañía antes del 31 de diciembre.
Los sindicatos han venido reclamando ,desde que se anunciara el cierre, una una ampliación del plazo para poder encontrar un inversor que se haga cargo de la compañía, "teniendo en cuenta cómo está el sector del automóvil", petición que ha sido rechazada por el grupo.
Los sindicatos han señalado "como responsable de esta situación al Grupo BATZ, integrada en Mondragón Corporación Cooperativa, que tras su compra en 2016 ha preparado el terreno para su cierre, con el paulatino vaciado de carga de trabajo para favorecer el cese de su actividad". ELA ha denunciado el papel jugado por la Ertzaintza que ha actuado como una policía privada contratada por BATZ”.