El circo más allá de las acrobacias

Aranda de Duero

"¡El espectáculo ha llegado a la ciudad!", "¡veeengan...!", "¡aceeerquense...!". Con este mensaje el Circo viaja por miles, millones de localidades a lo largo y ancho del planeta. Familias enteradas dedicadas al público al que iluminarle con una sonrisa, una carcajada o simplemente encontrar su asombro.

Ahora, le ha tocado el turno a Aranda de Duero. Este jueves, viernes y sábado -a 18:30 h- y el domingo -12:00 y 18:00 h-, la capital ribereña acoge el circo Los Titiriteros. Un espectáculo de acróbatas y payasos ubicado en una modesta carpa en la explanada del barrio de Santa Catalina.

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Una familia ambulante que desborda con su espectáculo de El Hombre Dragón, sorprende con sus equilibristas, apasiona con el Mundo Disney y divierte con sus payasos de la Familia Parada y El Pirri.

La otra cara de un mundo dedicado al público

Pero el circo tiene dos caras, una amable y otra no tanto, como la vida misma. El circo es el reflejo de nuestra sociedad. Armónico y agradable de una parte. Sufrido y por la otra. "Si algún día queréis que os hable del circo me gusta hablar sin pelos en la lengua", nos dice Eduardo, uno de sus gerentes. Con él repasamos su pasión que "ha pasado por generaciones" porque "sin pasión, sin ilusión... esto se hace muy duro", añade.

Eduardo desvela la realidad de un trabajo de "autónomos" donde "si yo estoy malo, aunque te duela tienes que estar ahí". Sin ayudas, a veces desamparados por las administraciones, explica que "no tenemos ningún respaldo económico, ninguna subvención, pero si pagamos nuestros impuestos para recibir alguna subvención, pero no recibimos nada y estamos luchando por ello". Otro de los aspectos a tener en cuenta proceden de la educación. "Cuando tenemos más de tres niños nos ponen la escuela, que pagamos, para que luego nos den la subvención. Pero hay que controlarlo muy bien para que nos den el visto bueno", manifiesta. Y es que el circo es como esa paradoja de la que vive nuestra carcajada y nuestro llanto. Un espectáculo real.

En el audio que encabeza esta información puede reproducirse el reportaje que la SER ha elaborado para conocer la realidad de un espectáculo que brilla, tanto por su espectacularidad, como por su precariedad.