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El Gran Canaria acaricia el play-off tras superar a un combativo Murcia (85-79)

Triunfo agónico pero balsámico para el Gran Canaria, que de nuevo sonríe a su afición con su segunda victoria en casa.

Elvira Urquijo A. EFE

El Herbalife Gran Canaria acaricia la zona de play-off tras sumar su tercera victoria consecutiva en la Liga Endesa, esta vez en casa ante un combativo UCAM Murcia (85-79), que puso contra las cuerdas a su rival en un duelo camaleónico y de continuas alternativas.

 Pese a no contar con el mundialista Xavi Rabaseda por una contusión en la mano izquierda -estaba previsto que jugara tras recuperarse de sus problemas con la muñeca derecha-, el conjunto amarillo cimentó su victoria en los puntos de Harper (22) y en la polivalencia de Beirán (21 de valoración), ante un rival que capitalizó sus opciones en el acierto de Booker (23 puntos).

En cualquier caso, los visitantes arrancaron más enchufados de cara a aro, sacando a relucir su artillería exterior a través de Booker y Luz, generando la primera hemorragia sobre su rival isleño (5-10).

Los pupilos de Fotis Katsikaris reaccionaron, y con un oportunísimo Harper -10 puntos en el primer cuarto- cauterizó la herida hasta reducirla a un ajustado 13-14, pero volvió a ser un espejismo.

Al momento reaccionó el UCAM poniendo tierra de por medio, firmando en el electrónico un más que elocuente 15-21, con un triple de Larentzakis como colofón a falta de 2:54 para la conclusión del primer periodo.

Las tornas cambiaron con la entrada de la segunda unidad amarilla. Nada más saltar al parqué, Beirán enganchó cinco puntos desde la pintura y la línea de personal (20-21), cerrando la herida Bourousis con dos tiros libres y Burjanadze con un lanzamiento desde el exterior (25-21). Larentzakis acabó maquillando la derrama local, pero ya se percibía un cambio de signo en el encuentro.

En el segundo cuarto, Beirán y Paulí retomaron las operaciones ofensivas, y a base de bandejas erosionaron aún más la trinchera murciana -parcial de 10-3-, aprovechando un inesperado cortocircuito de los pupilos de Sito Alonso (36-27).

Poco a poco, el Murcia fue recuperando el fuelle, con un nuevo repertorio de Booker entre la pintura y la línea de tres, secundado por los mates de Cate, equilibrando de nuevo la balanza (36-36) y forzando el tiempo muerto para los amarillos a 2:46 para el descanso.

En el intercambio final de canastas, el Herbalife tomó oxígeno con una última penetración de Harper que permitió a su equipo cerrar la primera parte con una ligera ventaja (45-42), ante una segunda parte que prometía más sobresaltos.

En la reanudación, Booker siguió aglutinando los galones en vanguardia, pero fue estéril, ya que las continuas rotaciones del Gran Canaria hicieron mella en el Murcia, pese a utilizar Katsikaris a 10 jugadores, con la ausencia añadida de Rabaseda.

Beirán puso la máxima diferencia en el ecuador del tercer cuarto (54-44), y aunque los exteriores levantinos apretaron las tuercas desde el perímetro, lo cierto es que el cuadro insular siguió contemporizando con una renta que rondaba cerca de la decena.

Sin embargo, todo se esfumó en un abrir y cerrar de ojos. En apenas un minuto, dos tiros libres de Tumba, un triple de Lecomte y un contraataque de Townes terminaron por darle la vuelta a la tortilla (58-59), ante la sorpresa de un Katsikaris que echó mano de un nuevo tiempo muerto.

Ya en el asalto final, el encuentro siguió bajo el mismo guion: un primer arreón local, ahora protagonizado por Shurna y Harper (67-59) que sería respondido por un nuevo repunte del UCAM (70-67).

A partir de ahí, el duelo anotador entre Harper y Booker se antojaba más que decisivo –los dos, por encima de la veintena-, hasta que el amarillo lanzaba un nuevo órdago a dos minutos para el final con un nuevo triple (78-72).

Alonso apuró su pizarra con un tiempo muerto y el ajuste táctico tuvo su efecto con un triple inmediato de Townes y un mate de Tumba (78-77), y el choque entró en un punto de agonía continua. A un triple de Cook respondía Booker con dos tiros libres (81-79), y con las espadas a todo lo alto a 30 segundos para el final.

Cook daba de nuevo aire con dos puntos desde la línea de personal, pero en la réplica final del Murcia, Booker perdió la pólvora en el momento decisivo, en una jugada protestada por la expedición levantina por una presunta falta sobre el americano.

Al final, triunfo agónico pero balsámico para el Gran Canaria, que de nuevo sonríe a su afición con su segunda victoria en casa (85-79), asomándose a la zona de play-off con un balance de 5-4, mientras que el Murcia se queda una semana más a las puertas, con 4 victorias y 5 derrotas en la Liga Endesa.

 
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