El albergue de Toledo se refuerza con la llegada del frío

Toledo

Con la llegada del frío se refuerza el albergue que Cáritas tiene en el casco histórico de Toledo para atender a personas sin hogar. Se trata de uno de los pocos que tiene atención las 24 horas del día. Algo que agradecen mucho los usuarios con las bajas temperaturas.

Virginia, la responsable del centro nos recibe y nos cuenta como funciona el centro. Aquí hay camas para aquellos que necesiten pasar la noche (en esta época se incrementan las plazas), ducha lavandería, zona de estar con biblioteca televisión y ordenadores y servicio de comedor. Cruz, la cocinera sirve unas 50 comidas diarias y también entrega comida a familias necesitadas para que se la lleven a casa. En ocasiones familias con trabajo pero tan precario que no les llega.

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El perfil del usuario de este albergue ha cambiado mucho, ahora gran parte de las personas que llegan aquí responden al perfil de hombre, separado que ha tenido que abandonar la vivienda familiar, en paro y sin apoyo familiar. Como es el caso de Leo, un joven venido de Argentina con formación universitaria pero que se ha visto en la calle.

A Leo le quedan dos meses para cumplir los 3 años para que le den la residencia por arraigo y los pocos trabajos que ha conseguido ha sido de manera irregular.

El sueño de la mayoría de estas personas es salir de la calle. Y recuperar su casa y su familia. Difícil es difícil pero también posible. Entre el 15 y el 20 % de la gente que pasa por este albergue lo consigue.

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