La ONCE defiende el modelo tradicional de venta de cupones en la calle

Santander

Edición especial del Foro SER Cantabria este martes, Día Europeo de las Personas con Discapacidad. El protagonista ha sido el vicepresidente de la ONCE, Alberto Durán.

La organización de personas invidentes o con discapacidad visual se ha convertido ya en un grupo social que tiene un impacto directo en el PIB nacional de 1.400 millones de euros al año.

El número dos de la ONCE ha defendido la vigencia del modelo tradicional del juego a través de la venta directa en la calle. Un modelo, asegura, que las nuevas tecnologías no ponen en peligro.

Porque, según Durán, los casi 20.000 vendedores de cupones que la ONCE tiene repartidos por toda España son un "elemento singular, que diferencia a la organización de ciegos del resto de empresas dedicadas al juego responsable".

Es un modelo caro, ha dicho, ya que de cada 100 euros que se ingresan, alrededor de 25 se destican al pago de la red de venta en la calle. Sin embargo, defiende Durán, cambiar ese modelo implicaría que la ONCE dejara de ser una "organización social".

Cada año 4.000 personas se quedan ciegas en nuestro país, según las cifras que el vicepresidente de la ONCE ha ofrecido en la edición de este martes del Foro SER Cantabria.

Entre los retos de futuro más inmediatos, Durán ha señalado las competencias digitales a las que se deben incorporar en mayor medida las personas con discapacidad visual.