Los veteranos de la diáspora regresan a casa
El presidente del Principado se reúne en el Museo de Bellas Artes con un grupo de emigrantes octogenarios que visitan Asturias por primera vez en décadas
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El presidente del Principado (en el centro) recibió a los participantes en el programa Añoranza en la sede del Museo de Bellas Artes, donde hicieron de anfitriones su director, Alfonso Palacio (primero por la derecha) y la presidenta del Consejo de Comunidades Asturianas, Paz Fernández Felgueroso (primera por la izquierda). / Principado de Asturias
Oviedo
El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha recibido este miércoles, y les ha acompañado en una visita al Museo de Bellas Artes de Asturias, a los participantes del programa Añoranza-Asturias 2019. Son cuatro asturianos, todos ellos ya mayores de 70 años, que se vieron obligados a emigrar siendo muy jóvenes, movidos por la necesidad. En algunos casos, es la primera vez desde su partida, que han vuelto a pisar Asturias.
Sus historias son muy distintas, pero comparten un denominador común: emigraron por necesidad. En la mayoría de los casos, acompañados de padres y hermanos, en busca de una vida mejor. Es el caso de Miguel Ángel Antonio Arrieta Suárez. Vive en Buenos Aires, en Argentina, país al que se lo llevaron sus padres con tan sólo seis años desde Villaviciosa. Ahora tiene 75 pero hacía 69 que no pisaba el Principado.
A Buenos Aires emigró también María Argentina Álvarez Fernández, natural de Tineo. Tiene ahora 83 años y ha vuelto acompañada esta vez de su hija por primera vez.
Hilario Menéndez Marrón, natural de Belmonte tiene 89 años y sí ha estado en más de una ocasión en Asturias, de donde se fue de adolescente movido por sus padres que querían una vida mejor para él.
El único de los participantes en este Añoranza 2019 que reside en Venezuela es Fernando Jesús Rodríguez Rodríguez, natural de Gijón de 70 años; hace 56 que no pisaba esta tierra de la que se fue con tan solo dos, aunque su familia regresó a vivir a Asturias cuando él tenía 14, después volvieron a emigrar, esta vez, para siempre.
