Ganar en Illueca para vencer al Tenerife
Luis César quiere que una victoria en Copa inyecte moral a un equipo "desquiciado"
A Coruña
Luis César Sampedro afronta una semana con doble compromiso y sin demasiado crédito en su cuenta. Tras diez encuentros, el arousán ha sido incapaz de sumar una victoria y el efecto de su llegada se ha diluido como un azucarillo en un vaso de leche. Mañana el Deportivo debuta en la Copa del Rey ante un equipo de Tercera División, el Illueca, en un partido que el míster espera sirva de punto de partida para una reacción en la Liga.
"Las victorias son lo único que da confianza a los jugadores. Ni palabras ni gestos. Cuando no ganas dudas de todo y de todos. . Necesitamos ganar y creer que puede ser el inicio de algo importante para la liga" afirmó Luis César. De ahí que el Dépor afronte un partido trampa en el torneo del KO. La victoria es necesaria, fundamentalmente de puertas hacia dentro y desde el punto de vista anímico. Pero del vestuario hacia fuera, la escasa entidad del rival convierten la victoria en un escaso botín, al mismo tiempo que una derrota añadirá más picante a una temporada en la que el equipo amenaza con batir todos los récords negativos de su historia.
La necesidad de conseguir la victoria es una factor que influirá a la hora de formar el once que mañana salte al campo. En otra situación las rotaciones podrían ser más profundas, se priorizaría la Liga y se pensaría en dar refresco a un equipo que en 72 horas disputará un partido vital ante el Tenerife. Pero la ausencia de buenas noticias ha provocado que Luis César haya elaborado una convocatoria con tan solo tres fabrilistas y que además, condicione su once al único obejtivo de ganar de la manera que sea. "Algún fabrilista será titular y tiraremos de gente que no jugó en Ponferrada. Algunos repetirán. El que lo haga bien y se vea bien le puede servir para jugar ante el Tenerife" manifestó un técnico que abre la puerta de la titularidad en Liga aquellos que se muestren fuertes ante el Illueca. De la citación se cayó ayer Peru Nolaskoain, aquejado de unos problemas físicos que han motivado su descanso para intentar que esté disponible en el choque del viernes.
El rival, un equipo de Tercera División, amenza con dar la campañada en el torneo del KO. De ahí que el entrenador coruñés avise del peligro que encierra esta competición. "Lo que necesitan nuestros jugadores es vencer y pasar esta eliminatoria. Se juega a 90 minutos y la superioridad futbolistica es más reducida que a 180. Lo que más necesitamos en esta situación es ganar". Un equipo, el illueca, al que definió como "un equipo ao que lle gusta xogar en campo propio. O terreo de xogo non é Riazor pero tampouco é pequeno. Hai que respetalos porque xa sabemos as desfeitas que houbo (na Copa) nos últimos anos".
Una plantilla destrozada
Luis César volvió a describir a sus jugadores como un colectivo destrozado desde el punto de vista emocional. Su defensa la inició poniendo como ejemplo a Jovanovic, uno de los jugadores que peor rendimiento está ofreciendo y que tampoco en Ponferrada consiguió elevar su nivel. "Jovanovic es de los tíos más implicados que yo he visto en mi carrera y está muy tocado porque las cosas no le salen. Los chicos están desquiciados, al primer contratiempo. Vienes en zozobra y no les vale nada: ni el pensamiento positivo, ni los apoyos, ni la autoestima... Tienen un desequilibrio emocional al primer contratiempo".
Continuidad en el banquillo
Consciente de que sus pobres números lo convierten en uno de los responsables de la situación actual, Luis César desligó su futuro del de Paco Zas, un presidente que ya ha puesto fecha de caducidad a su mandato. "Yo no he hablado con él de eso. Me ha traído el Deportivo porque no ganaban y para enderezar el rumbo. Mi presidente es Paco Zas pero me ha traído el Deportivo. No he sido capaz de enderezarlo, ni los jugadores ni yo, tampoco quiero hacer de esto algo individual".