Los agentes de la Guardia Civil de Tavernes niegan haber obligado a hablar castellano a unos jóvenes
La Asociación Pro Guardia Civil, APROGC, ha publicado un comunicado explicando su versión de los hechos
Tavernes de la Valldigna
La Asociación Pro Guardia Civil (APROGC) niega que los jóvenes que denunciaron abuso de autoridad y discriminación lingüística por parte de agentes de Tavernes de la Valldigna fueran obligados a hablar en castellano.
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En un comunicado, niega los hechos que denunció hace unos días la Plataforma per la Llengua, por presuntamente obligar a los jóvenes a hablar en castellano y retenerlos en un control de alcohol y drogas mientras iban de camino al festival Festivern de Tavernes, a final de año, además de decirles: "A mí me hablas español, que estamos en España".
Por contra, la organización sostiene que "los compañeros que actuaron en Tavernes lo hicieron correctamente, como hacen en toda la Comunidad Valenciana, sin haber tenido nunca problemas de esta índole".
Según su versión, durante este control de consumo de bebidas alcohólicas y drogas a conductores, "el conductor se dirigió a los agentes exigiendo que le hablasen en catalán o en valenciano, alegando que si no le hablaban en el idioma de su país no les reconocería como agentes de la autoridad y haría caso omiso a sus indicaciones".
Ante esta petición, asegura la asociación, los guardias civiles dijeron al conductor que "no tenían ningún impedimento en que él se expresase en la lengua que considerase más apropiado, que ellos entendían la lengua valenciana pero que no la hablaban y que le estaban hablando en el idioma oficial del Estado Español", además de advertirle que "si no seguía sus indicaciones y realizaba la prueba de alcohol a la que legalmente estaba obligado cometería un delito contra la seguridad vial".
Sin embargo, la Asociación Pro Guardia Civil subraya que "este conductor no paraba de exigir a los agentes que le hablasen en valenciano o catalán", además de "preguntar a otros usuarios de su mismo vehículo si los agentes estaban obligados legalmente a dirigirse a él en ese idioma".
Al mismo tiempo, "una de las usuarias de ese mismo vehículo se dirigía también a los agentes exigiendo que les hablasen en valenciano y animaba a usuarios de otros vehículos detenidos en el control a indicándoles que hablasen a los agentes en valenciano y que exigiesen que los guardias civiles se dirigiesen a ellos en esa lengua".
"Es habitual que en la interacción de los agentes de la Guardia Civil con usuarios en la Comunidad Valenciana los ciudadanos utilicen la lengua valenciana y se relacionan con ellos con total normalidad", recalca esta asociación de guardias civiles.