Vecinos del Orzán temen que el botellón se traslade a esta zona de A Coruña

A Coruña

La asociación de vecinos Ensenada del Orzán denuncia un incremento del botellón en la zona y teme que el que se celebra habitualmente en los Jardines de Méndez Núñez se traslade a sus calles, acrecentando aún más el problema. Denuncian que el ruido y los continuos altercados nocturnos están creando un problema de salud para los residentes debido a la imposibilidad para descansar durante las madrugadas de todos los fines de semana.

¿Qué pide la asociación de vecinos?

La entidad vecinal ha elaborado un informe en el que, a través de vídeos y fotografías, denuncia que seis de cada 10 locales causan molestias, y que la mitad ha generado quejas o denuncias. El botellón se expande, dicen, desde la plaza de Pontevedra hasta el Museo de Belas Artes. Ellos piden que, directamente, el Concello de A Coruña prohiba beber en la calle.

"Nadie tiene derecho a hacer ruido en la calle", se muestra rotundo este vecino. "Tenemos un vídeo en el que vemos un montón de gente haciendo ruido, una cafetería que está retirando las sillas arrastrándolas, lo cual está prohibido, no se puede arrastrar las sillas a esa hora de la madrugada; y se ve a tres policías de brazos cruzados en el medio de la plaza viendo cómo pasa todo esto. Entonces, una vecina pregunta para qué está ahí la Policía", relata.

Critican que es un problema que existe en el barrio desde hace 35 años a pesar de que cuenta con la calificación de Zona Acústicamente Saturada.

¿Cuál es la respuesta de Inés Rey?

Descarta prohibir beber alcohol en la calle. Se compromete a rastrear todos los puntos de la ciudad para acabar, eso sí, con las reuniones de gente bebiendo alcohol en la calle.

Señala que eso chocaría de lleno con las necesidades de los locales de hosteleria y las terrazas que sí cumplen las normas. Asegura que ha habido un refuerzo policial en la zona, pero considera que hay que equilibrar las necesidades de cada parte, tanto de vecinos como de hosteleros.

La alcaldesa busca equidad: "Hay locales de hostelería que cumplen estrictamente la ordenanza y que no causan ningún problema y por lo tanto, como administración pública, tenemos el deber de actuar conforme a un principio de equidad, valorar los intereses de todos los sectores sin causar perjuicios". Señala, además que se realiza un control exhaustivo cada fin de semana.

Se compromete a rastrear todos los puntos de la ciudad para acabar, eso sí, con las reuniones de gente bebiendo alcohol en la calle.