El efímero arte de perpetuar el interés por la pintura

Santa Cruz de Tenerife

Su obra duró exactamente tres días. Freddy Chalf, a caballo entre Londres y Berlín, se encuentra ahora mismo en Santa Cruz de Tenerife. Es la primera oportunidad en la que ha podido disfrutar de las temperaturas canarias, según él mismo ha reconocido. El fin de semana revolucionó la capital tinerfeña con una obra efímera: un cuadro del artista italiano Caravaggio, Cristo en la Columna, pintado con carboncillos sobre el suelo junto a la Plaza del Príncipe.

Tan solo quienes pasaron a su lado desde el viernes pudieron comprobar el proceso de creación de esta obra de Caravaggio que confiesa Chalf que para él “es muy importante”. De hecho, escogió esta obra “porque pensé en hacer algo especial; estaba muy contento por pintar en Santa Cruz”.

Su esencia no es original como él mismo reconoce; tan solo se fija en la tradición centenaria de Italia, acostumbrada a albergar obras efímeras de estas características poco habituales en este meridiano atlántico.

“Es muy importante que la gente se interese por la pintura y llevar el arte a lugares en donde no se lo espera. Sobre todo porque es necesario dar la posibilidad de ver el desarrollo de una obra de arte. Esto no se ve todos los días. La gente, a partir de eso se anima a dibujar y pintar y eso para mi es muy importante”, reconoce este artista internacional en una conversación telefónica con la Cadena SER.

De los trazos con carboncillo solo queda reflejada en una fotografía. Él mismo es quien las borra. Y así otras tantas obras que tan solo perduran en el recuerdo alrededor de toda Europa y al que Santa Cruz de Tenerife se suma, por un fin de semana, aunque parece que con mayor interés.

“Me he reunido con el Ayuntamiento y hemos hablando sobre la importancia del arte. Están muy contentos con lo que estoy haciendo y hemos planteado una colaboración para hacer algo con carácter más permanente por las calles de Santa Cruz de Tenerife”, aseguró Chalf.