La Casa Natal aborda la relación creativa y de amistad entre Picasso y Cela

Málaga

Pablo Ruiz Picasso y Camilo José Cela congeniaron y fueron amigos; de la relación de estos dos genios de la pintura y la literatura versa el centenar de obras expuestas en la sala anexa de la Casa Natal de Picasso, entre ellas correspondencia, pinturas y publicaciones en las que Picasso hacía las veces de escritor y Cela de pintor. Dos titanes de la creación a priori antagónicos ideológicamente que sin embargo mantuvieron una amistad intensa durante años que se plasmó en hasta cuatro colaboraciones marcadas por el maridaje entre literatura e imagen, relata Javier Pérez, el comisario de la muestra.

La relación comenzó en 1958, cuando Cela fue en búsqueda de Picasso a Cannes: quería dedicarle un monográfico en papeles en su revista cultural Papeles de Son Armadans. Desde entonces, el pintor estaría "muy presente" en la vida del Premio Nobel de Literatura, en palabras de su hijo, Camilo José Cela Conde.

En total Cela y Picasso se vieron ocho veces entre 1958  y 1973, pero su relación fue intensa, como demuestran los ocho dibujos a la cera que Picasso realizó para el escritor gallego el día que cumplía 45 años y que pueden verse en la exposición, o el mural de 20 metros cuadrados que Cela puso en su casa de Mallorca con una reproducción del dibujo que el pintor le hizo en un mechero con un centauro persiguiendo a una ninfa.

La muestra Trozo de Piel: Picasso y Cela, pasiones compartidas, que abre sus puertas este jueves, puede visitarse en la sala de exposiciones temporales de la Plaza de la Merced hasta el 31 de mayo.