Lolita Flores protagoniza el arranque de las Jornadas de Teatro de Eibar

Eibar

La cantante y actriz Lolita Flores es el primer gran nombre propio de la edición número 43 de las Jornadas de Teatro de Eibar. Tras la charla-coloquio inaugural del miércoles 26 de febrero, los dos días siguientes se escenificará en el Teatro Coliseo ‘La fuerza del cariño’, un montaje de la compañía Pentación en el que la integrante de la conocida familia de artistas se sube a las tablas junto a Luis Mottola, Marta Guerras y Antonio Hortelano. Se trata de una versión del texto de Dan Gordon dirigida por Magüi Mira.

Arranca así un mes largo de funciones, un amplio abanico de géneros que volverá a convertir a la ciudad armera en la auténtica capital vasca del teatro. Posteriormente, el festival eibarrés recibirá a Imanol Arias, quien escenificará 'El coronel no tiene quien le escriba', un montaje basado en la novela de Gabriel García Márquez, así como a Adriana Ozores y el espectáculo 'Los hijos'. Se trata de un montaje que pone el foco en la crisis medioambiental y en el que comparte tablas con Susi Sánchez y Joaquín Climent.

El programa de las Jornadas de Teatro de Eibar incluyen en esta edición el regreso del fino humorista y monologuista Luis Piedrahita, quien ofrecerá su nuevo espectáculo 'Es mi palabra contra la mía'. También volverá al festival la compañía granadina Histrión, que tan buen sabor de boca dejara con 'Lorca, la correspondencia personal' y que traerá a Eibar 'La isla', con texto y dirección de Juan Carlos Rubio. Se trata de un montaje interpretado por Gema Matarranz y Marta Megías, y que se centra en el dolor que, en ocasiones, significa vivir.

La edición de 2020 de las jornadas eibarresas ofrecerá también 'El rey Lear' de la compañía sevillana Atalaya, y de las gallegas Chévere y Pistacatro, que ofrecerán 'Curva España. La curva en la que se mató España' y 'Orquesta de malabares', respectivamente. Hay que destacar que este último espectáculo tomará parte la Banda de Música 'Cielito' de Eibar, bajo la dirección de Carlos Sánchez-Barba. Además, el colectivo teatral Eléctrico28 ofrecerá 'Full House', una fábula moderna sobre la convivencia en viviendas urbanas y de superación de las diferencias culturales. También habrá un hueco en el festival para la danza y el hip-hop con la compañía Brodas Bros, que ofrecerá el 21 de marzo 'Around the world', un espectáculo que combina la danza urbana y las nuevas tecnologías.

Las compañías vascas que están incluídas en la programación de este año son Vaivén con las versiones en euskera y castellano de 'Ni, munduko txarrena/Yo, la peor del mundo', montaje en el que interviene la actriz eibarresa Nerea Gorriti. También acudirá al festival la compañía Ados con 'Lloviendo ranas', así como Marie de Jongh con 'Ikimilikiliklik'. También se podrá ver este año en el festival 'Zaldi urdina', una coproducción de las compañías Axut!, Artedrama y Dejabu, así como 'Simplicissimus', el nuevo montaje de Tartean y 'Rámper, vida y muerte de un payaso', de la compañía Cancamisa Teatro.

También los valores locales tendrán un espacio reservado en el festival, ya que la compañía Kroketa, en la que se integra la actriz eibarresa Irene Hernando representará 'Surco' y también se estrenará en las Jornadas de Teatro de Eibar de este año 'Los olivos pálidos', el nuevo montaje de La Red Teatro y cuya historia se centra en Federico García Lorca y en la mujer que inspiró el personaje de Bernarda Alba. En el espectáculo, que está dirigido por el actor de Ermua Mikel Areitioaurtena, toman parte Maite Lorenzo, Nerea Ariznabarreta, Juanma Cano y el guitarrista flamenco Enrique 'El Vaka'.

Está previsto que el día 20 de marzo, tras la representación de 'El coronel no tiene quien le escriba', la organización del festival rinda un acto de homenaje a Juan Ortega, programador teatral y 'alma mater' de las Jornadas hasta el pasado año. En el transcurso del festival está previsto que se tribute un homenaje a Juan Ortega, quien fuese impulsor de las propias jornadas y del grupo teatral Narruzko Zezen. El tándem compuesto por el propio Ortega y el desaparecido Txema Cornago hizo posible convertir el festival eibarrés en un auténtico referente teatral y cultural.