CGT pide a la Junta la medición de los niveles de Acroleína en Renault

Palencia

El sindicato CGT ha denunciado en dos ocasiones, la primera ante la Inspección de Trabajo, y la segunda ante la Delegación de la Junta en Palencia, la acumulación de humos y gases nocivos para los trabajadores en determinadas zonas de trabajo de la factoría de Renault en Villamuriel de Cerrato. La Inspección resolvió a favor del sindicato instando a la empresa a realizar determinadas mejoras encaminadas a la reducción de esos humos. Ahora se va a proceder a la medición, por parte de la Junta, de los niveles de acroleína, una sustancia química muy tóxica, que consideran que existe en detrminados puestos de trabajo.

Determinadas zonas de trabajo de la factoría de Renault presentan, a juicio del sindicato CGT, elevados niveles de humos y gases, nocivos para los trabajadores, lo que ha provocado la presentación de las dos denuncias. Las mejoras realizadas por la empresa, considera el sindicato, que son insufientes por lo que ahora se va a proceder a la medida de los niveles de esas sutancias. Para Ricardo Vilda, como delegado de prevención de riesgos laborales en la empresa, resulta paradójico que cuando se están preparando para fabricar un coche híbrido, más sostenible con el medio ambiente, los trabajadores estén sufriendo de primera mano los humos y gases en la empresa, perjudiciales para la salud. Exigen a la Junta la medición de los niveles de Acroleina, sustancia muy tóxica que creen que está presente en varias zonas de trabajo de la factoría.