El coronavirus llega a la protesta sanitaria rural del cine mudo
El último capítulo de esta serie de gags humorísticos contra las carencias sanitarias rurales parodia las medidas de aislamiento para protegerse de la infección
RIBERA DEL DUERO
El fenómeno del coronavirus también forma parte ya de la serie de vídeos realizados en Guzmán para protestar por las carencias sanitarias en el medio rural. Este miércoles se han puesto en circulación a través de las redes sociales los dos últimos capítulos, el 18 y 19. El primero de ellos introduce la novedad de que deja de ser cine mudo para poner voz a una mujer que, con bata blanca, ofrece un cursillo de primeros auxilios en los que los vecinos, a falta de un médico, tendrán que atender las emergencias de sus paisanos, de las que serán avisados a través de una pulsera. Un episodio que está basado en informaciones publicadas en algunos medios de Castilla y León sobre el proyecto Soporte Vital Social, que la Consejería de Sanidad plantea extender a todas las zonas rurales despobladas de la Comunidad, basándose en el modelo nórdico que consiste en dotar a los enfermos de pulseras de aviso e impulsar equipos comunitarios de ayuda urgente, dando a la población nociones de primeros auxilios para atender inicialmente a sus propios vecinos hasta la llegada de los profesionales sanitarios.
Y el capítulo 19 parodia las medidas preventivas para evitar la expansión del coronavirus, mostrando un pueblo donde sus habitantes tienen que fabricarse sus propias mascarillas, con dos gomas, una servilleta y una grapadora, como si se tratase de un taller de manualidades y vigilar bien los accesos, para evitar la llegada de posibles infectados, expulsando a dos paisanos que vienen de la ciudad y que no parecen cumplir los requisitos de temperatura corporal y aspecto físico saludable para mezclarse con el resto.